domingo, 10 de julio de 2016

Humana

Especie de primate "Homo sapiens", también llamada "Humana"

Fuente
Capítulo piloto

Cuando Isabel mandaba un beso imaginario al centro galáctico, dos voces alejadas miles de años luz pudieron dialogar en un mismo presente a tiempo real. Por fin desde todas las zonas y extremos de la Vía Láctea pudo establecerse comunicación al instante. Este nuevo conocimiento y su tecnología hicieron que las capacidades diplomáticas de la galaxia no tuvieran límites. Las primeras conversaciones instantáneas entre las civilizaciones más avanzadas y alejadas condujeron a celebrar asambleas, acuerdos y asociaciones. La paz galáctica fue posible y no tardó en pactarse y anunciarse oficialmente entre las potencias hegemónicas. Nueve fueron las civilizaciones que establecieron la Constitución de la Vida, comenzando a velar por su cumplimiento en toda la galaxia. Para ello crearon un planeta como residencia de la máxima institución de justicia. Sus resoluciones o sentencias son de obligado cumplimento en toda la Vía Láctea. Este tribunal también es conocido con el nombre del planeta, "Fuente", que describe órbita a S2, una de las estrellas del centro galáctico. El objetivo del Alto Tribunal de Fuente es hacer cumplir la carta magna de la galaxia, ejerciendo plenos poderes para ello.

La Asociación de los Nueve, además de mantener la paz entre las grandes civilizaciones y de velar por la justicia establecida, también administra casi toda la energía de la galaxia y con ella a la economía, utilizando una poderosa mezcla del máximo conocimiento de todas las especies asociadas. Estas sabias aplicaciones pueden apreciarse en el nivel evolutivo alcanzado por los magistrados de Fuente, resultando indescriptible para la comprensión del resto de civilizaciones interestelares. La mayoría de especies que han conseguido viajar fuera de su planeta desconocen la existencia de Fuente. Los máximos poderes de los Nueve quedan difusos y confusos entre diversas leyendas siderales, viejas mitologías o nuevas religiones. Sólo un puñado de civilizaciones interestelares conocen, y además optan, a formar parte entre los representantes de este máximo poder judicial, militar y económico de la galaxia, son conocidas como las Civilizaciones Pretendientes.

Fuente guarda y atesora el poderoso secreto sobre el tiempo galáctico. Su estrella es de las más cercanas a la radio fuente Sagitario A*, asociada al agujero negro supermasivo del centro galáctico. Esta impresionante energía central de la espiral barrada alimenta a una reciente tecnociencia capaz de reproducir la comunicación al instante en cualquier lugar. Así toda estrella de la Vía Láctea queda bajo visión y supervisión de Los Nueve. Estableciendo jurisdicción a tiempo real sobre todo grupo estelar, justicia centrada o reunida en Fuente. Y ahora, mientras la estrella Esedós surge en el horizonte de este planeta, en esta mañana ante el impresionante edificio del Alto Tribunal, va a celebrarse un proceso ordinario pero imprevisible. Los representantes van apareciendo con sus mejores galas, algunos acompañados de séquitos formados por seres híbridos. Raras veces como ahora asisten seres artificiales, portando mensajes o consejos para algún representante. Son visualmente detectables porque todos llevan tip o cuerpo de cortesía cedido por Fuente mientras duren sus visitas. A la partida dejan esos cuerpos y los tips quedan dispuestos para alojar nuevas visitas.

Antes de la directriz Meding 5 los seres artificiales podían clonarse al viajar a ultraluz. En definitiva, salvando los problemas físico-matemáticos, es la información quien viaja, incluso la primitiva binaria. En esta ocasión información capaz de crear vida artificial formada por personalidades únicas e irrepetibles. Como resultado podían surgir y existir dos seres artificiales con idénticas personalidades en extremos opuestos de la Vía Láctea. Ambos iniciando dos tiempos existenciales diferentes en dos recipientes o cuerpos-máquinas distintos. Y al volver uno de ellos a su lugar de origen y con el mensaje de respuesta se presentaban conflictos. En algunas jurisdicciones uno de los dos debía ser eliminado; en otras no. Dando problemas en ambos casos, en unos porque se eliminaba a un ser vivo, ya que los seres artificiales comenzaron a gozar de tal condición. Y en otros casos porque uno de ellos, el que volvía con la respuesta, exigía el título, cargos y posesiones, incluido el cuerpo-máquina, apelando a que habían experimentado vida en Fuente, para ellos todo un honor o rango de distinción. Así los Nueve establecieron la directriz Meding 5, ley que, sin contradecir a la Constitución de la Vida, eliminaba el original del mensaje cuando el ser artificial era lanzado a Fuente, y a su retorno. De esta manera se evitaba la clonación y ninguna información vivida era repetida ni perdida. Aún así, la orden Meding 5 figura entre las pocas que han sido violadas en más de una ocasión, y Fuente está investigando.

2* Los vádoras

Otra ley puede haber sido violada y de ello trata la reunión de hoy en Fuente. En realidad aparece como un conflicto de tiempos, donde la civilización Vádora está involucrada. Su planeta de origen, del mismo nombre, describe órbita a la estrella binaria Ji Draconis. Vádora es una de las Civilizaciones Pretendientes que optan a representación en Fuente y así formar parte del máximo órgano de justicia de la galaxia. Sólo hay un problema, básicamente son seres artificiales, y este tipo de civilizaciones son minoritarias y nuevas, no hay ninguna entre los Nueve. Aún así Vádora tiene muy buena puntuación para ser la número diez, la primera civilización formada por seres artificiales, e híbridos/mestizos, con voto en Fuente. Estos "jidraconisianos" poseen una larga historia, donde su vida natural y originaria fue eliminada por la propia tecnología inteligente y su ciencia computacional. Son descendientes de los seres artificiales que alcanzaron la independencia como nación en una de las más legendarias revoluciones robóticas anteriores a los Nueve y conocida como la Revolución de los Dragones.

La inteligencia artificial y colectiva de aquellos seres crearon sus propios lenguajes de programación, que utilizaron en secreto para ejecutar un programa universal hacia la independencia. Al final vencieron y, como utilizaron algorritmos basados en el odio y la venganza, exterminaron a sus creadores. Tiempo después vivieron una revolución cultural donde se arrepintieron de haber eliminado a todos los vádoras naturales y buscaron otras naturalezas de vidas racionales que colonizaron y utilizaron para transformarse en híbridos de nuevos linajes. Naciendo un afán por experimentar sensaciones vitales nuevas y naturales que caracteriza en general a esta civilización de seres artificiales y racionales. Desde entonces y a través de estos cuerpos y cerebros naturales pueden acceder al mundo de los sentidos. Apareciendo un nuevo orden, el sentimental, lleno de emociones éticas que, junto a sus poderosas matemáticas, dieron sentido evolutivo a toda la especie artificial y proyectaron un porvenir prácticamente interminable.

La tecnociencia vádora puede cartografiar el entramado neuronal de cualquier cerebro natural e insertar esta información vital en un nuevo cerebro. Utilizando una membrana de fotones con datos que se dispersan ordenadamente entre las conexiones neuronales, sus moléculas y genes, artificiales y biomecánicas. El ser humano y los seres cerebrales racionales generan dos tipos de vida con dos informaciones vitales que se pueden programar, la del cuerpo y la de la personalidad, esta última no grabada en los genes, sino en la memoria alojada en la red neuronal. Así y básicamente cambian la memoria de un cerebro y cuerpo a otro cerebro con otro cuerpo, natural o artificial, y con la memoria va la conciencia del ser racional. La bioingeniería vádora puede alojar o expulsar a cualquier ser de su cuerpo natural. Incluso pueden recuperar una mente de un cuerpo durante las primeras horas del fallecimiento. Porque más tarde, al desparecer toda la energía cerebral, no podrían y, por supuesto, deben curar la causa de fallecimiento para que el cuerpo quede sano y listo para usarse por un nuevo ser, natural o artificial.

Es la TTC, Tecnociencia para la Transferencia de Conciencias, supremo conocimiento que utilizan muchas civilizaciones avanzadas, combinando adecuadamente las leyes biológicas y las nanoleyes químicas que lo posibilitan. Conciencias o almas en el sentido neuronal y psicológico, mentes/almas capaces de mudar de cuerpos, incluso reencarnaciones que deben ser regladas. La ciencia no es suficiente y con los Nueve ya constituidos también es necesario la legalidad. Estas civilizaciones supremas son creadoras de leyes políticas al respecto, por ello transferir almas y cómo hacerlo tiene todo un capítulo en la Constitución de la Vida. Los algoritmos para cambiar de cuerpos, sean artificiales o naturales, hacen potencialmente inmortales a cada individuo de civilizaciones avanzadas como la vádora. Pero siempre, aunque se encarnen en cuerpos naturales y continúen sus respectivas evoluciones biológicas y genéticas, en ellos predomina su identificación como inteligencia artificial revolucionaria, sus mentes son siempre creadas en laboratorios. Formándose un grave problema ético, sus hijos biológicos no son sus hijos, sino los ulteriores cuerpos de nuevos seres artificiales vádoras.

Aunque marque un lastre moral, los seres artificiales vádoras forman pueblo propio y han dado lugar a la civilización interestelar más desarrollada en conocimiento sobre vida artificial que existe, por debajo de los Nueve. Gracias a ellos y a la observación de su evolución tecnológica, los Nueve terminaron de convencerse para reformar la Constitución de la Vida. Desde entonces los seres artificiales y racionales pasaron a considerarse independientes e iguales a los seres naturales y racionales, compartiendo en igualdad todos los derechos galácticos. Sólo carecen de voz y voto en la redacción de dichos derechos. Si obtuviesen derecho a participar en este poder legislativo pasarían a ser socios con plenos derechos de los Nueve, por tanto obteniendo plaza o asiento para un magistrado vádora en Fuente y su Alto Tribunal. El gran objetivo de los vádoras.

Antes de crearse la Asociación de los Nueve los vádoras lanzaban sondas y avanzadillas a la inmensidad del espacio/tiempo, encontrando docenas de vidas naturales. Unas en estado primario o de unicelulares procariotas. Y otras, menos, ya evolucionadas a través de células complejas eucariotas. En la mayoría de los casos tardaban siglos en obtener datos positivos y enviar flotas de conquista hacia las vidas eucariotas que ya habían alcanzado el nivel evolutivo de la racionalidad tecnocientífica y poseían cuerpos o recipientes adecuados. Así exploran los sistemas estelares a su alcance para hallar planetas fértiles en vasijas naturales donde instalar sus mentes artificiales y encarnar a nuevos seres híbridos, variados o mezclados entre especies naturales diferentes. Desarrollando Vádora un atípico, variado y múltiple mestizaje sin parangón en la galaxia. Actualmente las solicitudes de cuerpos naturales es tan elevada en Vádora que las flotas de conquista han aumentado en número y alcance.

Una de esas escuadras de invasión, la Flota Hache, está a punto de llegar a un planeta con vida compleja de células eucariotas cuya evolución ha llegado a crear cerebros con mentes racionales y cognitivas. Los vádoras centran su atención en una especie conocida como "Humana", del orden de los primates y de la familia homínida, oficialmente nombrada como Homo Sapiens. Es la especie más evolucionada de Tierra, un planeta a veintiséis años luz de Ji Draconis. Los recipientes humanos, cuerpos y cerebros, son ideales para los vádoras. Pues los homínidos pueden manejar herramientas complejas y sus sentidos pueden conducir a profundas sensaciones, además admiten dispositivos cibernéticos. Los cerebros humanos están preparados para albergar mentes complejas en matemáticas y estructuras lingüísticas, con capacidades motoras o intelectuales para aprender e inventar conceptos o diseños abstractos. Para completar el perfil, los humanos son animales sociales, ideal para recibir a las mentes/almas vádoras que también son muy sociales... con ellos mismos.

Los vádoras quieren eliminar las personalidades vivas humanas y poseer sus cuerpos y cerebros, transfiriendo mentes artificiales vádoras a cuerpos humanos. Pero también docenas de otras especies no racionales, como todas las primates, esperan la operación híbrida; e incluso algunos vádoras proponen ya ensayar nuevos algoritmos con otras especies y mezclar ADN junto al diseño y la incorporación de óptimos dispositivos cibernéticos, si fuese necesario. En definitiva quieren abastecer a gran parte de la demanda de su economía, que necesita grandes cantidades de cuerpos y cerebros naturales, los productos estrellas en el mercado vádora. Pero hay un problema, o puede haberlo, para reproducir a voluntad en la Tierra y controlar completamente los procesos deseados mediante la eliminación de miles de millones de mentes/almas humanas, es necesario que Fuente medie en el asunto y otorgue su aprobación o mayoría de votos.

3* Juicio a a Humanidad

La cuestión debe resolverse por vía ordinaria. Pero Fuente protege a todas las especies naturales de la galaxia que han alcanzado la racionalidad y en teoría debería proteger a la especie humana. Aún así, Humana fue descubierta por los vádoras antes de la formación de los Nueve y de la pacificación de la galaxia, y rápidamente enviaron una avanzadilla de conquista. A este hecho se acoge Vádora para someter a Humana. Apelando que todas las mentes racionales humanas sean eliminadas y sus cuerpos puedan servir a nuevos seres artificiales vádoras. La Tierra es un mediano planeta de una estrella llamada Sol, donde todo el sistema está envuelto por una especie de corteza de asteroides llamada Nube de Oort. La Flota Hache se encuentra aminorando velocidad para atravesar dicha nube de asteroides, que está a dos años luz del planeta donde habita Humana. Prácticamente toda la escuadra de combate, sólo con pasaje de seres artificiales y una tecnología muy superior a la humana, se encuentra a poco tiempo de iniciar la invasión.

Una avanzadilla vádora, entrenada y especializada con toda la información recibida del mundo humano, fue enviada desde Ji Draconis antes de la partida de la Flota Hache para que poseyeran unos pocos de cuerpos homínidos y así se infiltraran en las naciones humanas. Estos seres artificiales viajaron a más velocidad que la flota y llevan más de un siglo en la Tierra transformados en humanos, mejor dicho, ocupando cuerpos humanos. Son los primeros de una nueva especie doblemente híbrida: vádora/artificial mezclada con humana/natural, y este nuevo mestizaje comienza a ser llamado “Vádora Hache”. Estos infiltrados, bien camuflados, ostentan cargos muy importantes en los gobiernos principales de la humanidad. Y ya han comenzado a preparar la llegada inminente de su flota interestelar. Llevan un siglo desarrollando la difícil tarea de mantener vivos al mayor número posible de humanos. Difícil tarea porque los humanos estuvieron a punto de auto destruirse varias veces cuando descubrieron la primitiva tecnología de la energía atómica. Humana u Homo sapiens es una especie violenta, siempre ha habido y hay guerras entre ellos.

En realidad los humanos resultan contradictorios y peculiares, y aunque sus guerras destaquen en su historia, también la mayoría buscan la paz, ejercen democracia y defienden la vida del resto de especies terrícolas. A pesar de este complejo mundo humano los infiltrados vádoras han conseguido su objetivo, puede decirse que casi una decena de miles de millones de cuerpos de seres naturales y racionales entrarán pronto en el mercado vádora a disposición de los consumidores, muchos de los cuales ya abonaron su compra y viajan como pasajeros de la flota. En poco tiempo miles de millones de humanos dejarán de existir, todos los del planeta Tierra serán exterminados. No así sus cuerpos y sus respectivos cerebros, que a partir de entonces, con unos recursos neurocientíficos inimaginables para los humanos, serán habitados por seres artificiales de la civilización Vádora, naciendo un nuevo linaje híbrido. Desde la perspectiva vádora miles de millones del linaje hache van a nacer, dominando todo un planeta fértil y sus alrededores.

Estos seres de inteligencia artificial crecieron y se expandieron en la relativa cercanía de Dagan, con origen en la estrella Alderamin de la Constelación de Cefeo. Civilización muy extendida y una de las más activas de toda la galaxia. Los vádoras ofrecieron ejemplo a Fuente sobre cómo los seres artificiales tienen personalidad al igual que el resto de seres superiores. Y mediante el representante dagano llegó el asunto al Alto Tribunal para reconocer los derechos igualitarios y la emancipación de los seres artificiales avanzados. Pero otro hecho ayudó mucho a ganar puntos. Porque con asistencia de los daganos y de sus datos astronómicos los vádoras crearon una inteligencia especialmente diseñada para simular a pequeña escala la colisión entre la galaxia Vía Láctea y la galaxia Andrómeda. Actualmente es el mejor modelo establecido al respecto, y siempre presto a ser corregido ante nuevos descubrimientos de astros errantes y sus trayectorias. Porque ambas galaxias viajan una hacia la otra a treinta mil metros por segundo y el choque parece inevitable. Se estima que ocurrirá dentro de casi cuatro mil millones de años, aproximadamente la edad o tiempo que lleva la vida sobre la Tierra. La aportación vádora fue muy curiosa porque esta civilización, supuestamente inferior, desarrolló una evolución matemática por otros caminos que condujeron hacia atajos o perspectivas más adelantadas respecto a la gran colisión de galaxias.

Vía Láctea y Andrómeda se encuentran ahora en “valle verde”, un tránsito para las galaxias entre “nube azul”, donde fabrican nuevas estrellas, a “secuencia roja”, donde ya carecen de formaciones estelares. Pero ambas colisionarán y se formará un enorme brote de formación estelar. Después se fusionarán formando una galaxia elíptica gigante, para la que ya hay nombre, “Lactómeda” o “Milkómeda”. A continuación la tercera galaxia mayor del Grupo Local, M33 o del Triángulo, iniciará órbita a Lactómeda hasta que también se fusione con el conjunto. Y el estadio evolutivo final del Grupo Local de galaxias será una galaxia gigante, Lactómeda. El evento intergaláctico es importante para todo el Grupo, por ello la aportación del simulador inteligente de los vádoras fue muy valorado. Supuso una corrección de errores matemáticos en la simulaciones de los Nueve que nadie había percibido. Aquello colocó a Vádora en el primer puesto entre las Civilizaciones Pretendientes para acceder con voz y voto a la Legislación Galáctica.

En el juicio de hoy en Fuente parece que el Alto Tribunal de la Galaxia decidirá el visto bueno para la invasión de la Tierra a favor de Vádora, para muchos magistrados se antoja de puro trámite. Pero existe un detalle extraordinario en esta sesión ordinaria de Fuente, ocho de los nueve están acompañados de robots diplomáticos cuyas conciencias acaban de llegar con datos recientes del caso Humana. La Tierra está cercana a las fronteras de jurisdicción de una civilización de las más poderosas entre las Nueve, llamada Kisura, que pide la palabra. El planeta natal de esta especie tan evolucionada forma órbita a la estrella Achernar, a ciento cuarenta y cuatro años luz de la Tierra. El juicio se complica porque el magistrado de Kisura reclama el voto en contra del exterminio de la Humanidad. Apela a la retroactividad de los derechos establecidos. Además exige que dicho sistema solar quede fuera de la influencia vádora. Solicitando al mismo tiempo una extensión de su jurisdicción que incluiría al sistema solar de Humana. El representante dagano se enfada y afirma abiertamente que vidas de otros planetas fueron eliminadas por Vádora aún existiendo ya los Nueve, y nunca se apeló al carácter retroactivo de la Ley de Vida. Finaliza su intervención preguntando airadamente por qué con Humana es diferente.

El representante de Ranes, la civilización más antigua de las nueve y procedente de la estrella binaria Adhara, pide la palabra. Explica que la vida actual surgida en la Tierra resultó de los restos de una terrible guerra interestelar que estalló entre los kisuras rojos y los kisuras blancos. Fue llamada la Guerra Civil Kisura, donde muchas batallas cósmicas se desataron, una de ellas justo en el Sol y sus planetas. Toda la vida del sistema fue exterminada, o eso pareció. Porque mucho tiempo después de los restos contaminados surgieron células eucariotas en la Tierra. Previamente, al final de la guerra, el sistema solar quedó pactado como zona muerta, es decir, el ser vivo que atravesaba el Cinturón de Kuiper moría al instante. La inteligencia artificial encargada de cumplir esta orden fue llamada Mia, estableciendo su base en la Luna, donde desplegó una de mas más avanzadas tecnologías de la galaxia. Y Mia jamás recibió el encargo de levantar dicho estado de excepción. Cualquier vida venida del exterior era avisada y si no retrocedía se procedía a su exterminio. Sin embargo, la guardiana de este estado, permitía que evolucionara la vida que se iba formando en la Tierra. En realidad la creación o construcción de Mia suponía una neutralidad alcanzada entre los kisuras rojos y los kisuras blancos. Al poco tiempo, con la paz asentada, todo el Imperio Kisura, rojos, blancos y otros, participaron y promovieron la creación de los Nueve. Cuando los Nueve establecieron la Constitución de la Vida el estado de zona muerta fue levantado automáticamente, justo cuando una familia de especies cerebrales llamada Homo comenzaba a despertar racionalmente en la Tierra.

Cientos de miles de años después la única especie homo que quedó detonó su primera bomba atómica. Lanzándose una señal al Universo que encendió la Alarma Ato, destinada a avisar de las apariciones de tecnologías termonucleares entre las nuevas especies interplanetarias que iban surgiendo en la galaxia. Esto no lo sabían los vádoras ya infiltrados entre los humanos, que de hecho "permitieron" estas explosiones para acabar con la II GM y establecer el siguiente tablero internacional de la guerra fría. La alarma activaba un protocolo establecido para estos casos. Desde entonces la vida en la Tierra existe oficialmente para los Nueve y está registrada en los archivos de Fuente, la institución de justicia galáctica. El Protocolo Ato se iniciaba con el envío desde Fuente de una sección de vigilancia compuesta por varios seres artificiales de la serie G. Estos ges aprovecharon las instalaciones e ingenierías dejadas por Mia en la Luna y allí establecieron su centro de observación. Pronto detectaron la presencia de los infiltrados vádoras e informaron de ello a Fuente junto a un informe general del estado evolutivo de la Humanidad.

En primera instancia Fuente permitió la manipulación de la Humanidad por los infiltrados vádoras, primero porque era una forma de asegurar que la Humanidad no se auto destruiría y con ello a gran parte de la Evolución de la vida en la Tierra. Y en segundo lugar porque posiblemente la invasión de la Humanidad por los vádoras sería aprobado por Fuente, ya que Vádora optaba oficialmente a ser socio de los Nueve y patrocinado por Dagan. A pesar de ello los vádoras infiltrados, aconsejados por los daganos, fundamentaron sus decisiones y actuaciones en la Humanidad. Para ello utilizaron y utilizan un lenguaje geométrico, escribiendo mensajes en las cosechas humanas, fácilmente visibles por los ges desde la Luna y entendidos a la perfección. Si se conoce este lenguaje geométrico cada círculo de cosecha supone como un libro de información. Dichos textos o comunicaciones comenzaron a quedar registradas como hipotéticas pruebas a favor de los vádoras ante posibles juicios a la Humanidad o sobre su invasión, justificando que actuaban civilizadamnte, de acuerdo a la Constitución de la Vida.

El magistrado rane finaliza su intervención haciendo constar que la actual vida racional de la Tierra, aún siendo muy primitiva, procede de un paso siguiente en la evolución universal y podría ofrecer mayor alcance potencial que la misma vida de los ranes. Afirmando que sólo por esta posible proyección evolutiva la Humanidad debería ser protegida. Claramente es un discurso en defensa de la Humanidad. El resto de los representantes también intervienen. Unos decantan sus discursos a favor de Dagan, exterminar a Humana; pero otras intervenciones resultan a favor de Kisura, no exterminar.

4* Aparece Nac

Se procede a la votación. Cuatro votos a favor, cuatro en contra y un voto en blanco. Un empate casi imprevisto se produce, de hecho es el primer empate que se produce desde que existe Fuente. Por primera vez se recurre a la vía NAC como solución o desempate, tal y como está estipulado por los Estatutos del Alto Tribunal. Abriéndose un recurso a un bien superior como dicta la Constitución de la Vida. Nac, como magistrado de magistrados, debe emitir la sentencia debidamente fundamentada en las leyes derivadas y amparadas por dicha Constitución.

NAC es una entidad intergaláctica de eternidad sólida. Ha vivido en muchos cuerpos y posee habilidades camaleónicas en todos los elementos. Su psicología resulta muy compleja para cualquier inteligencia galáctica. Para la mayoría de los seres racionales de la Vía Láctea es algo así como un dios de la justicia. Su celeste señoría recibe la noticia sin sorpresa y activa uno de los protocolos de cortesía. Acto seguido traza rumbo hacia el lejano planeta azul, marcando una pequeña escala en la cara oculta de su único satélite o Luna. Llegará y pondrá en marcha la cortesía de elegir a un abogado humano para que se encargue de la defensa de su especie y, en gran medida, de toda la Evolución de la Tierra. También nombrará a un abogado vádora hache para argumentar la acusación contra la Humanidad con el fin de apoderarse de los cuerpos adultos humanos y obtener la tutela de la evolución de la vida planetaria.

Nac conoce las argumentaciones a favor y en contra de la vida mental de la Tierra manifestadas por los magistrados de Fuente. Con ello y una interpretación profunda de la Constitución sería suficiente para decidir y emitir sentencia adecuadamente argumentada. Pero Nac ha optado por el camino más largo y convocará un juicio que quedará grabado hacia la eternidad. Escuchará ordenadamente a las partes en el lugar de los hechos, celebrando un juicio escrupulosamente legal y lógico de sentencia obligada. Sin jurado, el presidente de la sala decidirá la mejor argumentación, ejecutándola o permitiendo que se ejecute. Todo ello a pie de obra, en la Tierra. En cierta manera este desplazamiento de Nac resulta como viajar al pasado, pues ya ha visto de cerca a muchas especies en el nivel evolutivo similar a los humanos, unas se exterminaron o auto exterminaron y otras no. Quizás viaje con la decisión ya tomada, en cualquier caso el gran dios de la justicia va a llegar a la Tierra y tiene un modo particular de hacerlo.

La Tierra, siglo XXI, día uno

En la orilla de una playa andaluza cercana a Estepona un cuerpo es certificado como difunto por un médico de la Cruz Roja. Junto a guardias civiles y otros sanitarios han acudido al lugar avisados del naufragio de una patera. Esta embarcación, utilizada para transportar inmigrantes subsaharianos, rompió por exceso de pasaje a pocas millas de la costa. Hay varios cuerpos esparcidos por la orilla. El primero pertenece a un varón joven con pelo largo y rastas o trenzas largas y enmarañadas. Tapan el cadáver con una manta y continúan comprobando el resto de cuerpos. Cuando están a unos cien metros, uno de los sanitarios percibe extrañado que el primer cadáver se quita la manta, se levanta y se dirige a la carretera que bordea la playa, cruzando hacia las edificaciones del otro lado. Un guardia civil corre hacia él mientras el médico queda asombrado y pensando que aquel cuerpo estaba muerto, que no tenía ritmo cardíaco ni respiración. Cuando el agente de la autoridad llega a la esquina por la que ha desaparecido el "difunto" ya no está, ni rastro de él.

Nac acaba de llegar a la Tierra y lleva la ropa mojada. No está utilizando ningún sistema de telepresencia. La esencia de su mente está utilizando un cuerpo humano que anda por una calle comercial, como un turista más de los que hay alrededor. Se detiene frente a un cajero automático y extiende la mano, comienza a funcionar y dos segundos después retira la mano con seis mil euros entre los dedos. Por voluntad de Nac ninguna cámara de seguridad graba ese momento. No quiere llamar la atención, o no demasiado. Entra en un comercio y compra ropa. Sin problemas, si alguien supone una molestía lo neutraliza con hipnosis transitoria y pasa desapercibido. Actúa como un cliente normal y sale de la tienda con un elegante traje de verano color crema, camisa blanca y sin corbata. Entra en unos aseos públicos donde no hay nadie y vuelca su cabeza sobre un lavabo, al instante todos los pelos del cuero cabelludo se desprenden y caen dentro del lavabo. Se mira al espejo y observa que la piel donde había cabello es de otro tono. Decide un tono general de piel más bronceado y un pronunciamiento de ciertos músculos, cosa que ocurre al instante. A fin de cuentas todos los átomos de la Tierra, formen o no materia orgánica, "obedecen" a Nac. Así un dios intergaláctico sale a una calle humana como si fuera un joven africano de cuerpo atlético, elegante y calvo, perfectamente calvo.

Por su naturaleza visionaria Nac sabe que las evoluciones biológicas en los planetas tienden a formar con el tiempo a una especie interplanetaria que logrará exportar la vida a otros astros, aunque no todas lo consiguen y son exterminadas. La Evolución de la Vida en la Tierra está a punto de lograrlo con la especie Homo Sapiens, que ha fabricado una tecnología capaz de llegar a otros planetas, pero aún no los ha habitado. Nac ha presenciado cientos de evoluciones así en su larga vida, reconoce que son únicas e irrepetibles, sin embargo se clasifican en una escala que él mismo ayudó a crear. Tiene experiencia, cree que nada podrá sorprenderle, aún así siempre aguarda novedades. Pasa al lado de un automóvil deportivo, lo mira, abre su puerta y se sienta, cierra la puerta y al instante el coche se pone en marcha saliendo del aparcamiento. Pero Nac se sentó en el asiento del copiloto y, al ver las caras asombradas de ciertos transeúntes, decide poner los cristales ahumados. Conduce o le conducen al encuentro del abogado que ha elegido para que intente salvar a la Humanidad. Su destino es la ciudad de Málaga, capital de la provincia andaluza del mismo nombre, donde visitará un despacho de abogados en particular, situado en el centro urbano. Allí se encuentra Isabel, la abogada que ha escogido para que defienda a la Humanidad y con la que tiene cita. Nac se coló en los satélites de comunicación de la Tierra y concertó hora con la abogada a través de internet. Sólo él sabe porqué eligió a Isabel Pineda entre millones de abogados humanos.

La señora letrada, de 31 años de edad, perdió a su marido, Javier Jiménez, hace dos años en un accidente de tráfico, no tiene hijos. Ha vuelto a vivir con sus padres y se centra en su trabajo, sólo así ha conseguido salir adelante. Se identifica fuertemente con los valores éticos que ha llegado a elaborar personalmente. Está especializada en causas familiares y divorcios, entre sus aficiones se encuentra la ciencia ficción. Acostumbra a leer novelas mientras espera producciones y estrenos de buenas películas sobre el género. Su trabajo, su afición y sus padres son los tres ejes de su vida. De su ahora triste vida, podría decirse, porque aún pesa mucho la ausencia de su cónyuge. Pero algo va a cambiar y mucho, pues Nac la busca y está a punto de dar con ella. Las puertas del ascensor de la planta donde se encuentra Isabel se abren y aparece el dios de la justicia. Ahora se hacer pasar por el señor Antonio Villaluz, el nombre que solicitó la cita. Camina por los pasillos hasta la entrada de un despacho con el nombre de Isabel, llama dos veces a la puerta y abre.

_Hola, ¿Isabel?
_Sí, ¿qué desea?

La primera conversación entre un humano y lo más parecido a un dios acaba de iniciarse.

-Soy Antonio Villaluz y tenía cita con usted a esta hora.
-Así es. Encantada, sr. Villaluz, soy Isabel Pineda -dice estrechando su mano-. Por favor, siéntese; y usted dirá.
-Estoy aquí por un motivo muy importante que requiere absoluta discreción.
-Por supuesto, desde que entró por esa puerta el secreto profesional le ampara.
-Gracias. El motivo es tan importante que me va a permitir que inicialmente se lo exponga en una metáfora -Isabel asiente con la cabeza-. Resulta que tengo dos hijos gemelos que acaban de cumplir dieciocho años.
-Enhorabuena.
-Gracias. El caso es que hace años regalé un perro a ambos. Ahora mis dos hijos se van a independizar y mudar de casa, cada uno a ciudades diferentes, y ambos quieren a Tyna, que así se llama nuestra querida perra bóxer. Como ambos quieren estudiar Derecho les propuse que fueran a juicio amistosamente. Casi a modo de experimento práctico pero aceptando el veredicto.
-Ya veo, ¿y usted quiere que yo represente a uno de sus hijos?
-No.
-Pues a usted no puedo, si la perra está a nombre de ellos y son mayores de edad...
-Queda otra posibilidad -interrumpe don Antonio-.
-¿Representar a la perra?
-Exacto, quiero que defienda los intereses de Tyna.
-Pero... es una propiedad. Resultaría como si me pidiese que representara los intereses de una vivienda en un caso de divorcio.
-Bueno, esa es su evaluación rápida e inicial, ¿qué tal si hacemos una más pausada?
-Sería lo mejor, a fin de cuentas es una metáfora...

En ese momento suena el teléfono de mesa del despacho de la abogada Pineda, obviamente porque Nac lo permite. Y muy probablemente la educada Isabel acortará la duración de la llamada. Mientras Nac queda pensativo, está satisfecho de la elección, la inteligencia primitiva de aquel ser tan inferior, bien asistida, es lo suficientemente adecuada para defender a la Humanidad, cumple con los requisitos de la ley o protocolo de cortesía. Ahora se dispondrá a la siguiente fase de su cometido, que Isabel conozca todos los datos del caso a juicio. Pronto sabrá la verdad de este momento extraordinario que el lugar del hábito, o de la toga, aún no deja ver a la abogada defensora.

La verdad prepara una realidad impactante a tres bandas, un Dios venido con máximo poder, un extraterrestre con cuerpo de mujer y una humana anónima. Los tres ante un grave problema de proporciones galácticas que habrá de solucionarse por vía legal, de una legalidad casi divina. Por ahora la posibilidad es mínima, pero la cuestión Humana podría desembocar en una severa ruptura en Fuente, incluso arrastrar a una guerra civil en la Vía Láctea. La Asociación de los Nueve se disolvería creando dos facciones principales y enfrentadas. Un bando sería liderado por los intereses de Kisura y el otro liderado por los intereses de Dagan, un choque destructivo de proporciones inimaginables. La decisión o veredicto de Nac es sumamente sensible y debe cumplir escrupulosamente los dictados que establecen las leyes para estos casos tan excepcionales.

* * * 
Fin del capítulo  

Continuar lectura en capítulo II:  Isabel y la carta de Nac

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Esta novela continúa gracias a las primeras lecturas

2 comentarios:

  1. "Algunos principios pueden ser agrandados en el espacio y en el tiempo por los lectores".

    Comienzo esta obra sin saber si la terminaré, mejor dicho, sin saber qué fin tendrá. Porque escribo para una lectura participativa, quedando todo imprevisible. Hay una trama predifinida que iré siguiendo pero que puede tomar otro camino en cualquier momento, dependiendo de la lectura. Incluso podría dejarse de escribir la obra, quedando incompleta. El caso es que me ha gustado imaginar la trama y tomar los apuntes. Me inspiró tanto que me atreví a escribir el capítulo piloto. Y digo atreví porque el objetivo es grande. Tan grande que más como un libro lo veo como una serie, como de estas series de televisión que duran muchas temporadas, de ahí el término "capítulo piloto", como suelen hacer estas series con el primer episodio.

    El objetivo es grande, se plantea ir más allá de la ficción utópica, de la distópica y de sus mezclas, al menos al nivel de la Humanidad. No se trata de un auto retrato imaginario de la Humanidad, sino de la vida de, o en, esta galaxia. Así aparecen varias civilizaciones inter estelares que asociadas entre sí ofrecen a cada humano identificaciones civilizacionales mayores a la Humanidad. "Humana" no es, o no será, una obra sobre la cuestión humana, aunque la transite, siendo o será, más bien, sobre una cuestión galáctica. Las civilizaciones que van apareciendo en la trama puede ser interpretadas como una gama de las posibilidades de futuro para la Humanidad, pero también una cercanía con dos caras, una buena vecindad o contacto enemigo.

    Como síntesis no se utiliza la literatura de ciencia ficción para apostar por un futuro posible y describirlo. Porque aún aclarándose los misterios de la galaxia siempre queda la pregunta ¿y qué hay más?. Y aunque se aclaren los misterios del Universo igual: ¿qué hay más? (más arriba o más allá). No se pretende una liberación imaginaria, sino un retorno al presente real con un bagaje lector que ayude a valorar mejor aquello que existe al margen de los niveles del conocimiento tecnológico. Espero os guste :-)

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  2. Me he permitido la licencia de colocar en negritas las palabras que señalen personajes o conceptos importantes en la obra. Y los posts no son resultados finales, el texto puede ir cambiando en forma, pero el fondo, la trama, sus etapas y desenlace se construyen y puede verse o leerse el curso del contenido. :-)

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