El encuentro
Capítulo
IV
El
encuentro de las partes
Comisaría
de Policía de Marbella, Rafael Bernal está sentado a solas, con los
codos apoyados en una mesa de reunión y los ojos cerrados. Permanece
conectado a sus compañeros vádoras repartidos entre los países más
poderosos de la Tierra. La coordinadora o jefa de todos ellos es
Drolas, con residencia en Washington, donde utiliza el nombre y
cuerpo de Sophia
Sheppard, oficialmente la segunda en responsabilidad de
la vicepresidencia de los Estados Unidos. Ahora Drolas informa que
otra anomalía está ocurriendo en el puerto deportivo de
Benalmádena. Además destaca que tras haber consultado todos los
archivos de las actuaciones piratas en otras conquistas, y de
cotejarlo con el modus operandis marcado por estas anomalías
en la Tierra, no coinciden.
Por
lo tanto cree que no son los piratas, desconfía y sospecha del
vecino Imperio Kisura. Porque el “gran
lector”, un programa padre de inteligencia
artificial, y muy secreto, desarrollado por los vádoras para ahondar
en el origen de las especies y de las vidas planetarias, dedujo que
muy probablemente Kisura tuvo contacto, influyendo o no, con la vida
terrícola después de la declaración de zona muerta, burlando la
vigilancia del guardián de la orden. Si fueran los kisuras
resultarían mucho más poderosos que ellos, así que habrían de
establecer un nuevo protocolo a seguir. Hasta entonces Drolas
suspende la asamblea de los vádoras hache. El coronel Bernal, o
Urli, abre los ojos, al mismo tiempo tocan dos veces a la puerta y se
abre. Un inspector aparece y comunica:
_Señor,
acaban de informar de un extraño suceso en Benalmádena.
Bernal sabe desde hace dos minutos lo contenido en el mensaje transmitido desde la comisaría benalmadense. Aún así deja que su subordinado le informe.
_Dígame.
_Cuatro militares británicos de vacaciones en la Costa del Sol han sido detenidos en Benalmádena porque iban corriendo aterrorizados como poseídos. En principio se creyó que fue provocado por sustancias alucinógenas, pero las pruebas y análisis sólo desvelan exceso en alcohol.
_Cuatro militares británicos de vacaciones en la Costa del Sol han sido detenidos en Benalmádena porque iban corriendo aterrorizados como poseídos. En principio se creyó que fue provocado por sustancias alucinógenas, pero las pruebas y análisis sólo desvelan exceso en alcohol.
_Y
dónde está lo extraño.
_Pues
que los cuatro decían ser perseguidos por monstruos terroríficos y
que uno de ellos es negro, pero afirma que hace unas horas era
blanco. Lo curioso es que en su carné y pasaporte figura de rasgos
caucásicos.
_Pues
sí que es muy extraño. Preparen inmediatamente un helicóptero de
mando y otro con un equipo de intervención. Vamos hacia allí.
Allí
sigue Isabel familiarizándose con Rotus. El autómata ha resumido
perfectamente la situación en la que se encuentra la abogada y le ha
detallado la disponibilidad de su servicio, un inmenso poder. Rotus
puede salvar a Isabel de un disparo, del derrumbe de cualquier
edificio que le caiga encima, incluso de la explosión de una bomba
atómica que ocurra a su lado. Puede dilatar tanto el tiempo que un
segundo puede ser un minuto para él. Tiene capacidad para desplegar
pantallas virtuales, también puede producir una pantalla esférica
alrededor de ella, creando un cambio de ambiente total, disfrazando
el entorno real con uno virtual capaz de recrear cualquier paisaje.
En un intervalo de las palabras del autómata Isabel pregunta si
siempre será una bola. Rotus responde:
_No. Puedo adoptar cualquier forma y materia en cualquiera de los cuatro elementos básicos para los humanos: Tierra, Agua, Aire y Fuego. En realidad, para ser esta bola he de juntar átomos de muchos metales y comprimirlos. Mi masa no puede ser sostenida por esta mesa, si dejase caer mi peso natural perforaría el suelo varios kilómetros hasta detenerme.
_Así es -interviene Nac-, Rotus podría tapar al Sol y dejar a la Tierra a oscuras. Sólo tienes que ordenarlo y lo hará.
_¿Y
tú lo dejarías? -Isabel
pregunta sin actitud desafiante-.
_Jajaja
-otra
vez una risa leve de Nac provocada por la humana-,
claro, yo no pierdo ni gano nada con la Tierra y toda su vida. Sin
embargo, toda ella está a mi juicio, aunque algunos crean que es a
mi merced. Puedes hacer lo que quieras mientras a mí no me
perjudique, pero como no sabes todo lo que puede perjudicarme, haz lo
que quieras, que si me perjudica ya te avisaré con tiempo.
_Me
asusta tanto poder.
_Eso
es bueno, preocupante sería lo contrario. Por cierto, parte de ese
poder lo utilizarás en breve.
_¿Por
qué?
_
Ya te dije que "invité" a un vádora hache. En unos
minutos llegará y os conoceréis. Hasta entonces he de ausentarme,
tengo que tratar otros asuntos. ¿Quedas bien?
Isabel responde positivamente mientras lanza una mirada a la bola plateada. Nac se levanta y se marcha otra vez en dirección al faro de poniente. Isabel queda a solas con la bola. Llega el camarero, retira los vasos vacíos y pregunta si desea algo más. Responde que un zumo de naranja. Cuando el camarero se va Isabel pregunta a Rotus:
_¿Te ha visto el camarero?
_No.
Por regla general, si te parece bien, nadie escuchará lo que hable
contigo, nadie verá las imágenes que despliegue ante ti y nadie me
verá. Cuando quieras que esto no sea así sólo tienes que
ordenarlo.
_¿Puedes
adoptar una forma humana?
_Por
supuesto, ¿cuál deseas?
_No
sé, por ejemplo la del camarero.
La bola comienza a expandirse lentamente hasta formar un cuerpo humano que queda de pie al lado de la mesa. Es como una escultura de metal resplandeciente y exactamente igual al cuerpo y vestimenta del camarero.
_Oh,
es precioso, parece metal líquido -exclama
Isabel-. Me
recuerda a un súper héroe de cómic que iba en una tabla de surf.
_Sí,
está en mis archivos sobre la Humanidad. Era un heraldo.
_Un
heraldo, sí, que se rebeló contra su superior.
_Porque
fue un heraldo forzoso, y su superior era más poderoso que él.
_Es
verdad -sonríe
Isabel-, yo
soy muchísimo más débil que tú.
_Ellos
eran dos, nosotros no somos dos, somos uno. Simplemente soy una parte
de ti, como puede serlo uno de tus brazos.
_Un
brazo no es inteligente.
_No
creas, si un brazo roza un metal al rojo vivo no espera tu aprobación
verbal o mental para retirarse y, casi automáticamente, él mismo se
retira. Conlleva recursos inteligentes y en si mismo es una creación
inteligente.
_Es
cierto.
Pasa
unos segundos de silencio e Isabel baja la mirada, como si hubiera
recordado algo que la pusiera triste. Entonces Rotus
pregunta.
_Qué
necesitas.
E
Isabel responde casi sin pensar:
_Reír.
En
ese momento llega el camarero con la bandeja, el zumo de naranja en
vaso alargado, con una pajita y adornado con una sombrilla en
miniatura. Rotus se pone en pie cerca de Isabel, al lado contrario al
que el camarero se dispone a servir y comienza a repetir todos sus
movimientos, pero con el brazo contrario. Incluso lleva una bandeja y
un vaso igual figurando pequeñas esculturas de cristal. Rotus
deposita su vaso al lado del vaso con el líquido naranja y en el
mismo momento que el camarero. Los vasos son exactamente iguales,
sólo que uno parece de cristal y es plateado.
Isabel aguanta la risa viendo las imitaciones de Rotus. Apenas puede dar las gracias por el servicio sin descubrir una carcajada. El camarero no lo percibe y se retira mientras Rotus hace lo mismo en sentido contrario. Isabel no puede más y comienza a reír en voz baja, intentado que el camarero no la escuche. Acto seguido agradece la función improvisada de Rotus
Isabel aguanta la risa viendo las imitaciones de Rotus. Apenas puede dar las gracias por el servicio sin descubrir una carcajada. El camarero no lo percibe y se retira mientras Rotus hace lo mismo en sentido contrario. Isabel no puede más y comienza a reír en voz baja, intentado que el camarero no la escuche. Acto seguido agradece la función improvisada de Rotus
_Gracias, lo necesitaba.
_Siempre
a tu servicio.
_Bueno,
qué sabes del vádora humano que llegará.
_Se
hace llamar Rafael Bernal, su verdadero nombre es Urli. Y tú los has
visto, incluso dialogaste con él.
_¿Que
yo lo he visto?, ¿cuándo?
_Esta
mañana en la gasolinera, fue el que te dijo que este mundo estaba
muy mal repartido.
_¿Ese?...
Vaya, vaya, pues me dio la sensación de ser un poco don juan.
_Es
adicto al sexo, casi todos los vádoras lo son.
_Bueno,
Rot -Isabel
utiliza por primera vez un diminutivo cariñoso para Rotus-.
Dime, ¿qué opinas de la Humanidad?
_Yo
no puedo opinar.
_Ah,
es verdad. Pues dime algo ilógico que captes de la Humanidad.
_Por
cercanía sería el camarero.
_¿El
camarero?, ¿por qué?
_Porque
es licenciado en historia y se está doctorando en arqueología, sin
embargo, aún habiéndose preparado tantos años para esa función:
trabaja de camarero, no tiene lógica.
_Es
por la crisis económica que ha traído mucho desempleo y trabajo
precario.
_Entonces
la Humanidad está utilizando una economía muy por debajo de sus
posibilidades.
_Muy
cierto, es un punto débil de la Humanidad y de su defensa. Nos queda
mucho trabajo por hacer y estoy deseando comenzar. Nosotros solos,
planificando una buena estrategia de defensa. Pero no logro
sintetizar aquello a lo que nos enfrentamos. Dime, Rotus, como
defensora de la Humanidad a qué me enfrento.
_Obviamente
a la sentencia de Nac tras un juicio previo donde te medirás a Urli,
cuya jefa es Drolas, infiltrada como Sophia Sheppard, número dos de
la vicepresidencia de los Estados Unidos.
_¿Tienes
una foto de ella?
_Ahí
la tienes.
Una
imagen aparece flotando en la mesa y ante Isabel. Es tridimensional,
de unos treinta centímetros de lado, donde aparece quieto el cuerpo
de una mujer de unos cuarenta y cinco años. Pelo rubio, ojos claros
y piel blanca, es guapa y lleva un vestido elegante.
_Gracias
Rotus, ya puedes quitar la imagen.
Isabel
da el último trago al zumo de naranja y deja el vaso vacío encima
de la mesa. Acto seguido alza su mano y llama al camarero. Le pide
una tapita de queso manchego y agua mineral sin gas. Pero antes de
irse le pregunta:
_Y
perdone la curiosidad, ¿no le he visto alguna vez en la Facultad de
Derecho?
_Puede
ser, alguna vez fui, pero yo estudié en la facultad de historia.
_Pues
sí, muy probable, iba mucho a la biblioteca de esa facultad. Por
cierto, me llamo Isabel Pineda.
_Encantado
Isabel, soy Vicente Herrera.
Y
marcha para cumplir con el pedido de la cliente, y ahora conocida,
Isabel Pineda. Rotus, que ha atendido la conversación en silencio,
vuelve la cabeza y mira a lo lejos la figura de Nac:
_Nac
nos comunica que Urli está llegando en helicóptero, y pide que lo
recibamos nosotros hasta que él pueda venir.
_¿Nosotros?,
¿y cómo lo recibimos?
_Parece
que debemos recibirlo en paz, sin hacerle daño.
_Así
sea.
Isabel
piensa en la inmensidad del poder de Rotus mientras ya escucha
helicópteros a lo lejos. Son dos de diferentes tamaños, el pequeño
se dirige a un claro entre los aparcamientos y aterriza. El grande va
dejando en varios puntos a policías bien equipados que se
deslizan con cuerdas. Nada más tocar suelo los poderosos sensores de
Urli localizan a Isabel. La policía de la localidad, que ya estaba
alertada, se presenta y se pone a las órdenes de Rafael, que les
pide rodear el restaurante en un perímetro de cien metros. Mientras
Vicente llega a la mesa de Isabel con la bandeja, el queso y el agua
mineral. Y casi tropieza porque se desequilibra al mirar a lo lejos a
los helicópteros y a la policía.
_Qué raro, cuando hacen exhibiciones hay público y no dejan aparcar allí -aludiendo a que el Puerto Deportivo suele ser escenario de exhibiciones de fuerzas de seguridad, de bomberos y de otros cuerpos afines-.
Isabel
mira a Rotus y éste, sólo para sus oídos, propone:
_Si
quieres puedo proteger a Vicente.
_Sí,
por favor -aprueba
Isabel-.
_Cómo
-prorrumpe
Vicente sin entender bien-.
_Quería
decir que por favor no te asustes. Vienen a hablar conmigo, en cierta
manera es un compañero para un trabajo pendiente.
_¿Otro
abogado?
_Sí,
es como un abogado del Estado.
_Entonces
me alejaré, que dos abogados juntos podrían ser peligrosos
-desarrolla
Vicente en tono de broma-.
Isabel sonríe mientras observa cómo deja el queso y el agua en la mesa. Vicente se marcha hacia el interior del restaurante, quedando la terraza con todas las mesas vacías menos la de Isabel. Está en una avenida amplia, con un lado con terrazas de bares, heladerías, restaurantes y otros locales comerciales; y al otro lado las embarcaciones amarradas. A ambos extremos de la avenida ya se ven los cordones policiales. Por uno de ellos aparece un hombre que parece mandar. Lleva un impecable traje de verano con corbata, es Rafael Bernal, que ordena:
_No
dejen pasar a nadie y esperen en alerta a mi vuelta, pero bajo ningún
concepto disparen sobre la sospechosa.
Comienza a caminar hacia la terraza donde está Isabel mientras percibe una elevada concentración de energía cerca de ella. Cuando está a unos veinte metros lanza unas sondas a su cerebro para que evalúen la posibilidad de hipnotizarla y que le cuente todo lo que sabe. Es un recurso que Urli utiliza mucho entre los humanos. Pero las sondas no vuelven con la información. La cara de Rafael muestra seriedad extrema y precaución al acercarse más. El miedo podría hacer que lanzará todo su potencial armado contra Isabel y contra el centro energético al lado de ella. Opta por la vía diplomática y otorga a Isabel la categoría de igual hasta que sepa más. Cuando llega Isabel se pone de pie y afirma:
_Qué mal está repartido el mundo. Pero ahora le atenderé mejor, caballero. Encantada de verle de nuevo, soy Isabel Pineda.
Rafael
suspira, sonríe y responde al saludo.
_Soy
Rafael Bernal, encantado de conocerla. Antes de nada informarle que
estoy al corriente que usted es una simple humana, así que debo de
preguntar: ¿quién le protege?
Entonces
Isabel ordena a Rotus que se muestre sólo para Urli y éste exclama:
_Oh,
magnífico -Urli
queda maravillado con el autómata que se ha formado en breves
segundos ante él y que inunda de datos sus sondas y registros-.
¿A qué civilización perteneces?, ¿de alguna civilización de
Fuente?
Rotus,
sin que Rafael puede oírlo, consulta a Isabel si puede responder al
vádora hache, ella niega con la cabeza y respondiendo a la pregunta
sentencia en voz alta:
_De
la mía.
_Jajaja
-Rafael
ríe abiertamente-.
Esto no es capaz de construirlo la Humanidad ni en dos mil años más
de evolución.
_Sé
del plan Vádora para este planeta -afirma
Isabel rotundamente para dar un giro brusco de la conversación e ir
al centro de la cuestión-,
y conozco la llegada de su flota de exterminio, señor Urli.
El
medio extraterrestre queda más impresionado. Ahora sabe con
seguridad que no son los piratas los causantes de las anomalías. Su
primera lógica le indica que algo pasó en Fuente y la aprobación
final no se ha producido. Su segundo razonamiento le aconseja
averiguar todo lo posible para deducir la mejor jugada posible para
los vádoras. Por ello lanza rápidamente una llamada a todos los
infiltrados vádoras de la Tierra y que así telepresencien aquel
encuentro inesperado. Pero las señales no llegan ni a cien metros,
porque son frenadas por algo más poderoso y desconocido para el
vádora. Así, el que iba a capturar, resulta que ha sido capturado.
Por primer vez Urli se da cuenta que está aislado, atrapado por
poderes más avanzados que los de su civilización. Pocos vádoras
han experimentado esta sensación. Su poder está sometido y, sin
embargo, no le hacen daño ni intentan destruirlo. Mira a Isabel y
pregunta mostrando ahora más respeto hacia la humana:
_¿Quién es este ser tan maravilloso? -pregunta señalando a Rotus-.
_Una
extensión de mí misma.
_¿Y
quién te ha dotado de este poderoso autómata?
_Obviamente
alguien muy poderoso, mucho más poderoso que tú y que yo.
_No
estaba cuando nos cruzamos en la gasolinera.
_Al
contrario, lo llevaba en mente, pensaba en él.
_Entonces
mi lógica sostiene que alguien poderoso llegó ayer a la Tierra, te
buscó y te ha regalado el autómata más avanzado que he visto en mi
larga vida. ¿Por qué?
_Porque
la Humanidad va a ser sometida a juicio.
Mientras
Nac llega a las espaldas de un cordón policial, entra en la mente de
todos los agentes y hace que lo vean como al mismísimo subdelegado
del gobierno, el jefe provincial de todos ellos. Y con voz alta
indica:
_Señores, dejen paso, que soy el anfitrión de esa reunión.
Todos
abren hueco y los mandos se cuadran y saludan reglamentariamente. A
dos de ellos les tiende la mano y se la estrechan. Urli en ese mismo
momento siente una enorme fuerza desatada y mira al cordón policial
por donde Nac está llegando, mientras Isabel afirma:
_Ahí
llega nuestro anfitrión, el señor juez.
Urli
siente pánico, el ser que se aproxima trasciende todas sus escalas
de medidas. Azorado, no sabe qué hacer, está aterrorizado. En
cierta manera le gusta sentir miedo, pues nunca lo ha sentido y
anhela sentirlo como algo que no puede experimenta como ser
artificial. Nació como inteligencia artificial y la sensaciones que
un cerebro natural puede transmitir son muy valiosas para él,
incluido el miedo. Pero aquello sobrepasa la expectativa, resultando
terror, su parte natural está transmitiendo verdadero pánico a sus
sentidas que lo están dejando paralizado. También podría
descontrolarse y ello le asusta más. Ahora es un ser híbrido
sintiendo verdadero pánico humano. Cuando Nac llega a la mesa Urli
se levanta de repente, aparta rápidamente la silla y se arroja a los
pies de Nac:
_Dios,
tenga piedad de mí, nunca había visto una divinidad como usted.
_No
seas cobarde, Urli, siéntate en la silla y atiende.
_Estoy
aterrado.
Nac
tranquiliza a Urli con la mirada y posiblemente con algo más. El
vádora por fin puede controlarse y, efectivamente, ya sólo siente
miedo y un poderoso respeto que le hace poner atención como nunca
antes en su vida. Por supuesto se sienta, también se sienta Nac,
entonces llega Vicente:
_¿Están
bien servidos o necesitan algo más?
_Sí,
traiga más queso y tres copas del mejor vino tinto, por favor -pide
Nac educadamente-.
_En un instante -dice Vicente el camarero mientras se retira-.
_En un instante -dice Vicente el camarero mientras se retira-.
_Veo
que lo has protegido -señala
Nac a Isabel refiriéndose a Vicente-.
_Sí,
me asusté un poco con la movida de los helicópteros y le pedí a
Rotus que lo protegiera -reconoce
ella algo nerviosa-.
_Muy
bien, Isabel. Ahora voy a aprovechar que Urli es un ser avanzado y
enviaré a su mente, en un instante, toda la información, o la misma
que sabes tú, sobre el juicio a la Humanidad. Dentro de unos
segundos estará al tanto de todo y sabrá cuál es su papel.
_Gracias
-sólo
acierta a decir Isabel después de aquella demostración de Fuerza-.
Por
fin Nac establece la máxima seriedad entre las futuras partes,
acusadora y defensora, fundamentando un tribunal y anunciando el
juicio. Eliminar a una especie racional es algo muy serio y Nac debe
cumplir escrupulosamente el proceso legal establecido. El juez debe
dar carta blanca a las partes y acceso a toda la información
vinculante al proceso. Así comienza el encuentro donde quedarán
manifiestas las dos posturas lineales y extremas, la vida o la muerte
para la Humanidad.
_Ahora que ya conocéis los fundamentos del asunto he de informaros que el juicio será legal en toda Fuerza y grabado por Registro para la eternidad, cumpliéndose el Artículo 13B de la Constitución de la Vida: "Todo raciocinio superior que indique favorable la eliminación de una especie racional deberá ser celebrado como un juicio con debate grabado donde las partes tendrán derecho a exponer sus argumentos. La grabación será expuesta a disposición de las más altas instancias de la galaxia o superiores". Quedáis oficialmente nombrados representantes de las partes en juicio.
_"Un raciocinio para eliminar a una especie racional...", ¿no conlleva cierta contradicción? -cuestiona Isabel-.
_Como
debe ser -responde
Nac al instante-,
eliminar a una especie racional es algo muy serio y debe ser
extremadamente cuestionado. La sentencia que ordene algo así debe
superar con raciocinio y lógica dichas contradicciones. Y no sólo
tienen razones los pensamientos inteligentes, también el concepto
vivo que llamáis corazón o sentimientos.
_Eso
me gusta más, que el corazón tenga poderosas razones.
_También
he de comunicaros que el Artículo 13C establece que la eliminación
no puede ser total y absoluta. Indicando que debe sobrevivir una
reserva viva de la especie, menor al uno por ciento de su población,
en el planeta de origen y con libertades suficientes para la dignidad
y la independencia.
_Los
vádoras nunca hemos hecho esto de la reserva en ninguna invasión,
es nuevo.
_Sí.
Porque si no hay una reserva natural de la especie eliminada no
podría existir un carácter retroactivo de cualquier revisión que
las altas instancias efectúen contra la sentencia o porque detecten
injusticias. La eliminación de una especie racional y natural para
la instalación de vidas artificiales en modo híbrido es algo que
para una ética normal, como la mente de Isabel, resulta un acto
cruel y de codicia. Sin embargo para la mente vádora, regida por la
lógica numérica y la ética de los placeres, simplemente es un acto
recomendable debido a la fuerte demanda de vida y expansión.
_Así
es, señor -asiente
Urli-.
_No,
así no debería de ser. La propia evolución de la vida natural
termina regulando y frenando la lógica explosión de crecimiento de
una especie racional. Sin embargo los vádoras no dejáis de fabricar
vidas artificiales, cada vez muchas más. No cesáis de introducirlas
en androides para que esperen ser transferidas a cuerpos naturales de
racionales naturales previamente eliminados. No es una exigencia de
la demanda, sino de vosotros mismos que lo habéis convertido en
una seña de identidad de vuestra civilización.
Urli
inclina la cabeza aguantando la reprimenda. Entonces Nac mira a
Isabel.
_Y de las deficiencias de la Humanidad mejor me callo, no daré pistas a la acusación.
Isabel
también inclina la cabeza. El camarero llega con la bandeja y
percibe ese momento de sometimiento mental. Nac le muestra una cara
sonriente mientras Isabel y Urli permanecen serios. Vicente deduce
que el sonriente es el jefe y está echando una reprimenda a los
otros dos. El supuesto jefe se asemeja a los millonarios nigerianos
que Vicente acostumbra a atender últimamente, aunque también podría
pasar por un político estadounidense, pero habla en perfecto
castellano con acento español. Vicente decide no especular más,
coloca los platos en silencio y se va. Nac toma una loncha de queso,
bebe un sorbo de vino tinto y continua hablando.
_Hay
otra cuestión importante, la diferencia evolutiva entre abogado
acusador y abogado defensor es inmensa, por ello la
ley también establece que en estos casos se conceda
ayuda al de rango evolutivo inferior, aconsejando que el tribunal que
celebre el juicio le dote de un autómata de protección y
asistencia, en este caso un Gax de servicio especialmente diseñado
para este fin y ya activado. Y para finalizar este comunicado oficial
os anuncio que, si fuerza mayor no lo evita, el juicio se celebrará
el treinta y uno de agosto. Hasta entonces preparad vuestras tesis y
recordad que, sea cual sea la sentencia, la celebración del juicio
quedará grabado para la eternidad, y será vista por seres que
vosotros mismos consideráis como dioses. Otra cosa muy importante,
no debéis informar a nadie de este juicio. Si lo hacéis ganará
automáticamente la parte contraria.
_Señor,
yo lo tengo muy difícil, mis iguales vádoras pueden localizarme
fácilmente y entre todos podrían someterme y leer mi pensamiento.
_Lo
sé, y no sólo permitiré que informes a tu jefa planetaria, sino
que será ella, contigo como ayudante, quien será la abogada de la
acusación. Ella sí podrá mantener fácilmente este secreto entre
los vádoras. Pero si el dato sale de entre vosotros, perdéis. Ya se
puede ir, señor Urli. Y retire a todas las fuerzas de seguridad
humanas, que esta zona vuelva a la normalidad.
_Señor,
perdone, ya por último, como parte acusadora, ¿no tenemos derecho
también a otro autómata como el que tiene la defensa?
_No,
vosotros tienes toda una flota de invasión, la más poderosa que hay
en este sistema solar.
_Sí,
pero el autómata del abogado defensor podría destruirla.
_Es
un riesgo que debe correr todo el que participa en exterminar
especies de la Vida. Pero tranquilo, Isabel y su autómata tienen
prohibido atacar a los vádoras. Y esta reunión oficial ha
finalizado.
Urli
se levanta, inclina su cabeza y, otra vez como Rafael Bernal,
abandona la terraza. Al poco rato las fuerzas de seguridad comienzan
a irse y los helicópteros vuelven a elevarse, marchándose hacia
poniente. Nac mira cariñosamente a Isabel y anuncia:
_El encuentro oficial ha terminado. Ahora puedo preguntarte como amigo, ¿cómo te encuentras?, Isabel.
_Gracias
Nac. No sé cómo estoy, es superior a mí, demasiado superior.
_¿Sabes
porqué nadie debe saber lo del juicio? Porque el conocimiento del
dato por muchas personas y sus mentes/almas puede influir con fuerzas
aparentemente indetectables y desequilibrar la balanza de la
justicia. Si te das cuenta he incluido a los humanos cuando he
ordenado que nadie más lo supiera. Porque en eso no hay diferencias
con los vádoras o con otros seres de otras especies avanzadas. Estar
vivo y tener mente racional crea campos de fuerza al margen de la
evolución tecnológica y del conocimiento. Así que no es superior a
ti. Tienes potencial para desplegar todos los recursos necesarios.
_Tengo
miedo a fracasar, a que la justicia elimine a la Humanidad y me quede
un remordimiento de conciencia brutal.
_Tú
lo has dicho, será la justicia, no tú. Y quiero que pienses
detenidamente que en caso de exterminio al menos cuatro millones de
humanos se salvarán.
_¿Por
qué cuatro millones?
_Porque
el cero coma uno por ciento de ocho mil millones son ocho millones y
la mitad son cuatro millones. Pues la ley dicta menor al cero coma
uno por ciento, y la mitad sería equitativa. Por eso digo que al
menos cuatro millones se salvarán. Y tú deberás elegir a estos
Salvados de la Tierra si se produjese una sentencia fatal para los
humanos.
_¿Yo?,
además de defensora: ¿salvadora?
_Sí,
con ayuda de Rotus. A algunos podrías señalarlos o nombrarlos, los
demás puede elegirlos Rotus con los patrones o parámetros de
perfiles que consideres más justos.
_Habría
que elegirlos de manera que sobrevivan todas las lenguas posibles,
todas las razas, todas las generaciones de edad y, por supuesto,
paritario en género sexual.
_¿Ves
como puedes?
_¿Y
el lugar donde sobrevivirían?
_Yo
aconsejaría una isla o un archipiélago.
_Serían
las islas afortunadas.
_Mirado
por el lado humano sí, serían las afortunadas.
_Pues
has elegido a las Islas Canarias.
_¿Y
eso?
_Porque
son también conocidas como las Afortunadas.
_Jajaja
-Nac
vuelve a reír una tercera vez con Isabel-.
Por mí de acuerdo, en caso de extermino habrá una excepción, y en
las Canarias podrán sobrevivir cuatro millones de humanos libres. Y
ahora he de irme. Que la Inteligencia te acompañe.
_Igualmente
Nac, hasta pronto.
Nac
se despide al igual que hizo en la carta, con un “que la
Inteligencia te acompañe”, pero ahora cobra otro significado
para Isabel. Con la carta interpretó la despedida como una
invitación a tomar una decisión inteligente. Ahora sabe que no fue
por eso... E Isabel queda mirando al cielo, imaginando al Observador,
como un escriba del Logos en el que Nac parece creer.
*
* * Fin del Capítulo * * *
Capítulo I: Fuente
Capítulo II: La carta de Nac
Capítulo III: Rotus
Capítulo V: Piratas en Tierra
Esto de escribir sin presiones es una maravilla. El texto fluye casi automáticamente, ya vamos por el capítulo IV (unas 50 páginas). Incluyo en "sin presiones" la preocupación por valorar la calidad de la novela. Sobre todo porque no hay novela, la novela sería el proceso finalizado. Lo importante ahora es una expansión de la trama que incluya importantes procesos personales de los personajes. Después habrá tiempo de decorar todos los párrafos, buscar sinónimos adecuados para las palabras más repetidas, incluir alguna descripción del ambiente o paisaje cuando no exista ninguna, y todas esas labores pesadas que en el caso de los escritores "ricos" (que no son escritores profesionales pero sí personas famosas), suelen recaer en ayudantes.
ResponderEliminarAhora, ya que el texto se produce casi automáticamente, me preocupa descubrir argumentos poderosos en contra y a favor de la Humanidad. Y todo ello introducirlo entre los diálogos. Ello incluye ética y filosofía, incluso política y economía. Pero ¿qué ética es aquella superior a la alcanzada por la humanidad? No puedo desarrollar empatía al respecto. No puedo ni siquiera alcanzar la crema de la ética humana, como para alcanzar otra muy superior. Es todo un desafío para un humilde agnóstico como yo. Y me obliga a un cierto deísmo, no a buscar a un dios, pero sí a intentar saber qué sería importante para él y qué problemas tendría frente al cosmos.
Es cierto que si observamos la Historia desde sus comienzos y, sin importar el nivel de conocimiento alcanzado, hay patrones de conducta que se repiten, por ejemplo la rebeliones y las grandes traiciones. Cuando el hombre supo que la Tierra era redonda y antes, cuando pudo volar y antes de poder volar, cuando llegó a la luna y antes de llegar a la Luna, no importa en qué nivel de conocimiento o civilizador se encontraba: siempre hay patrones comunes del comportamiento. Es decir, es posible que los "dioses" (civilizaciones muy avanzadas), al menos los intermedios, puedan traicionarse entre ellos, puedan mentir y puedan también ignorar algunas verdades superiores a ellos. Yo no puedo subir al nivel de los "dioses" o de civilizaciones avanzadas para desarrollar empatía y escribir desde sus perspectivas, pero puedo hacer que bajen al nivel general humano, y esto es una gran ventaja de la ciencia ficción :-)
GLOSARIO DE TÉRMINOS
ResponderEliminarPor oden de aparición en la novela
(Marcados en el texto con negritas)
. La Constitución de la Vida: Leyes establecidas para esta galaxia por las doce civilizaciones más evolucionadas de la misma.
. Fuente: Planeta/Institución donde reside el máximo órgano de justicia de la Vía Láctea, formado por doce magistrados.
. Los Doce: Hace alusión a la Asociación de las civilizaciones más avanzadas de esta galaxia, también puede referirse a los doce jueces de Fuente.
. Medding 5: Una ley especial que, sin contradecir a la Constitución de la Vida, prohibe la clonación de seres artificiales.
. Vádora: Civilización formada por seres que nacen artificiales y después se convierten en híbridos, mezclándose conn cualquier especie natural racional. Opta a formar parte de Los Doce.
. Revolución de los Dragones: Acontecida y llevada a cabo en la civilización Vádora, donde los vádoras artificiales se rebelaron violentamente contra los vádoras naturales y los extreminaron.
. Flota Hache. Escuadra vádora de invasión dirigida a la Tierra
. Homo Sapiens: Especie racional y natural de la Tierra.
. Dagan, Kisura y Ranes: Tres civilizaciones de las que integran a Los Doce.
. Fuerza: Gobierno general del Grupo Local de galaxias donde se encuentra la Vía Láctea.
. NAC: Miembro destacado de Fuerza, resuelve los empates del Tribunal de Fuente.
. Isabel: Humana y abogada defensora de la Humanidad.
. Constitución Intergaláctica: Carta Magna de Fuerza y que rige leglamente el Estado del Grupo Local de Galaxias.
. INTELIGENCIA: Nombre te´orico que recibe la sabiduría más allá de Fuerza y de los seres que la poseen.
. Vádoras Hache. Seres racionales surgidos de la mezcla de cuerpo humano con mente/alma vádora.
. Urli: Vádora hache infiltrado en la élite del poder humano. Utiliza el nombre de Rafael Bernal.
. Rotus: Autómata y asistente de Isabel Pineda.
. Drolas: Presidente de la Asamblea de los Vádoras Hache en la Tierra hasta la llegada de la Flota, y Coordinador de los inflitrados en los principales gobiernos humanos.
. Vicente Herrera: Humano, historiador y arqueólogo que trabaja de camarero debido a la crisis económnica en España.
. Artículo 13B: Ley de la Constitución de la Vida que establece un juicio público y grabado previo a cualquier eliminación de una especie racional.
. Artículo 13C: Ley que impide la eliminación total y absoluta de cualquier especie natural, estableciendo en caso de eliminación una reserva viva de la especie en el planeta de origen y con libertades suficientes para la dignidad y la independencia.
. Salvados de la Tierra: Humanos favorecidos por una medida de gracia (art. 13C) en caso que la Humanidad sea exterminada, su cantidad se estima en cuatro millones.