El voto pardillo

Los hechos quieren decirme algo. La democracia participativa de Podemos Benalmádena nació el 21 de junio de 2014, al mismo tiempo que nacía Podemos Benalmádena. Y “murió” a principios de 2015, cuando se estableció el actual órgano directivo. Desde entonces un reducido grupo, bien colocado en los cargos, ha tomado el poder oficial y utilizado para fines electoralistas (sin el visto bueno de la asamblea de Podemos Benalmádena). Mientras, la Asamblea está “muerta” o “en coma profundo”, y peor aún resulta cuando tanto la necesitamos. Porque se han tomado decisiones muy serias que, cuanto menos, requieren el visto bueno y directo de la Asamblea. ¿Por qué el Consejo Ciudadano no convoca a la Asamblea y le explica estas actuaciones tan serias? Tan serias como que algunos de sus miembros se presenten en listas de partidos satélites cuando Podemos, oficialmente, no debe presentarse a las Municipales. Esto es muy serio y trastoca nuestra ética y a nuestras decisiones como asamblea a nivel estatal. Cuanto menos requiere un explicación bien fundada y unos argumentos contundentes ante la Asamblea local, entre iguales, tal y como reza en nuestro modelo organizativo.

Bastante gente en Benalmádena se pregunta ya: ¿cómo el órgano directivo de Podemos Benalmádena se presenta a las Municipales si Podemos Estatal lo contradice?, y más grave todavía: ¿cómo lo hacen sin el visto bueno o aprobación de la Asamblea de la que emana dicho órgano directivo? Las respuestas son obvias, pero aún así yo mismo requiero excusarme cuando digo que soy de Podemos, y declarar que no soy cómplice del sin-ética (por no decir sin-vergüenza) órgano directivo de Podemos Benalmádena (PB). Cuando digo que soy de Podemos necesito añadir que soy uno de los que se oponen al actual órgano directivo de PB, para que así no me confundan y no me metan en el grupo que tan mala fama está cosechando. A cinco meses de su elección el Consejo Ciudadano de PB todavía no ha convocado una Asamblea para dar cuentas del gobierno de este partido local y de sus actuación tan serias. Puede ser que tenga miedo de convocar una Asamblea y perder los cargos de consejeros ciudadanos, pero quien tiene miedo de convocar a una asamblea democrática: muy democrático no es. Y mucho menos, deduzco, puede pregonar o decir que opta por la democracia participativa cuando los hechos demuestran todo lo contrario, pareciendo que tienen miedo a la gente que sabe y se centran en la gente que no sabe. Pues en el caso que necesiten “pardillos” para gobernar yo no quiero ser uno de ellos.

Dicho esto necesito preguntar para saber si Podemos Benalmádena es la Asamblea o es el Consejo Ciudadano. ¿Quién puede hablar como Podemos Benalmádena, quién debe? Necesito saber si los pardillos son o somos mayoría y si estoy entre ellos. Pero pase lo que pase mi conciencia ciudadana es muy clara: necesito un partido cimentado en la democracia participativa; si Podemos Benalmádena no sirve debería recordárselo porque figura en sus modelos ético y organizativo. Es mi deber como simple inscrito en Podemos Benalmádena llamar al orden al actual órgano directivo de Podemos Benalmádena y de pedir justicia a la Asamblea. Y en ello estoy junto a más compañeras y compañeros que piensa como yo en este caso. Por mi parte individual, si al final no se restablece la democracia participativa y no se retoma la Asamblea como máxima autoridad: me veré obligado a dejar Podemos Benalmádena. Mi conciencia ciudadana y yo buscaremos otro partido cimentado en la democracia participativa, en las mayorías y minorías entres iguales, porque mi conciencia y yo podemos. Gracias. Ahí la pregunta para los que opinamos libremente en este foro:

¿Podemos Benalmádena es la Asamblea o es el Consejo Ciudadano?

Respuestas posibles:

La Asamblea

El Consejo Ciudadano

Ambos

La pregunta está mal formulada

La cuestión no es procedente en campaña electoral

PD: Si algún titular de este foro de Facebook no tiene la opción “Preguntar” a la hora de publicar aquí, yo la tengo, y la pongo a servicio de quien quiera someter a voto de opinión alguna cuestión. El voto es la mitad de la democracia, y el voto es una respuesta. Para que exista voto (respuesta) debe existir antes la otra mitad, la pregunta (cuestión convocada, la convocatoria). Si queremos participar más en la democracia no sólo debemos votar más y mejor, también preguntar más y mejor, y entre iguales, para que puedan o podamos todos. ;-)