domingo, 4 de agosto de 2019

El cielo mágico


Érase una vez en una tierra muy lejana que se encontraban tres hermanos. Desde muy pequeñitos perdieron a su madre y quedaron huérfanos. El hermano mayor se hizo cargo de sus hermanos que, a su vez, eran muy trabajadores. Todas las mañanas cuando cantaba el gallo el hermano mayor se despertaba para hacer el desayuno a sus hermanos menores. Mientras sus dos hermanos desayunaban, el hermano mayor siempre subía a lo más alto de una montaña vecina para hablar con su mamá. Él se decía a si mismo que, cuanto más cerca estuviera de la cima de la montaña, más cerca estaría de su madre.