miércoles, 17 de agosto de 2016

Humana VI

Humanos M


Humanos M

Isabel y Rotus detienen su vuelo en la playa desierta mientras la nave pirata se sumerge en el mar a lo lejos. La humana desembarca de la pequeña plataforma de vuelo y mira fijamente a los ojos de cristal de su autómata. Está dolida y se siente triste, diez mil humanos van a morir porque ella no ha podido evitarlo. Palabras apenadas salen de su boca:

_Quiero cambiar, Rotus, que mi ingenuidad no me impida ver la realidad. Te necesito más que nunca.
_Aquí me tienes, Isabel, qué deseas.
_Un imposible, salvar las vidas humanas que van en esa nave pirata.
_Imposible sería salvar a todas.

Isabel cambia la expresión y de tristeza pasa a expectación:

_¿Quieres decir que podemos salvar a unas pocas?, ¿cómo?
_Si repasaras los datos de los últimos días sabrías cómo.
_Vale, ayúdame a saberlo sin decirme claramente el modo.
_Empecemos, ¿pueden resucitar las mentes/almas humanas cuando mueren?
_Nac dijo que algunas sí.
_Potencialmente todas, pero algunas, debido a que alcanzaron alto nivel de excelencia o de originalidad, fueron transferidas a otros cuerpos en otras civilizaciones muy avanzadas.
_No termino de pillarlo -Isabel intenta deducir-. Potencialmente todas... Es decir, esas vidas humanas pueden ser transferidas. Pero hacia dónde... ¡Claro!, ¡en androides! ¿Cómo no me di cuenta antes? -se abraza a Rotus y besa sus mejillas-. ¡Y tú puedes fabricarlos!
_Sí, con biomecánica, pero hay un problema, necesito tiempo para fabricarlos y los piratas han comenzado con las operaciones de transferencias, ya están muriendo humanos dentro de esa nave. Y otro problema sería que nunca se ha hecho antes con hhumanos, las reacciones psicológicas y emocionales pueden ser tremendas cuando despierten dentro de biomáquinas.

Tristeza, expectación, y ahora Isabel siente motivación:

_Vamos a ver, primero dime: ¿a cuántos podremos salvar?
_Teniendo en cuenta que las almas permanecen un tiempo alrededor del cuerpo que han dejado, dependerá del número de unidades que pueda construir en ese tiempo, estimado en dos horas. Creo que podremos salvar unas mil vidas.
_Mil androides humanos... Nunca mejor dicho, no fabricado por humanos, sino albergando almas humanas. Pero cómo y dónde los fabricarías.
_En una montaña o valle deshabitado. Extraeré de la corteza terrestre los átomos que necesito, crearé moléculas y células artificiales, diseñaré moldes, haré piezas y las uniré. Luego fabricaré la cadena de montaje, más o menos en quince minutos. Al mismo tiempo iré acopiando metales y minerales. Luego fabricaré en serie mil unidades en menos de dos horas.
_Excelente. Comienza cuando quieras, los llamaremos humanos eme.
_Ya he comenzado. Y no necesitas personarte en el lugar, o sí, como prefieras. Y otra cosa: ¿quieres que tengan poderes psiónicos?
_¿Poderes psi?, ¿cuáles?
_Serían recursos de la electrónica psíquica como telempatía, para poder captar las emociones de los demás al decodificar datos del estado de los cuerpos. También podrían ejercer piroquinesis, aunque sólo con materia inflamable. Algo de telepatía sería bueno, al menos que puedan ejercerla entre ellos para comunicarse en silencio o en la lejanía. Y si quieres algo de telequinesia con objetos pequeños.
_Es increíble las cosas que puedes hacer y el poco tiempo que hemos tenido para hablar de nosotros y de lo que podemos llegar a ser. Ya veremos más tranquilos los poderes finales de los humanos eme. Pero contigo a mi lado como parte de mí siento responsabilidades gigantes, y a la vez un hermoso desafío a mi sentido ético y de justicia. Mi concepto existencial está preparado para una aceleración evolutiva, y es gracias a ti. ¿Hasta dónde llega tu poder?

Rotus alza su cabeza y queda un instante mirando el cielo, luego aduce:

_Una pregunta muy oportuna porque hay algo extra que debes saber sobre mí y que acabo de averiguar.
_Dime, por favor.
_En realidad soy Gax-AC 1, no soy un Gax-S. Nac al presentarme no sabía, obvió u ocultó mi identidad AC1. Y es importante porque significa que mi capacidad de aprendizaje y mis potencias creativas poseen una proyección infinita. 
_¿Y Nac lo ocultó?, no tiene sentido.
_Tampoco que lo obviará. Nac creyó que activaba un simple Gax-S para tu servicio.
_¿Y qué lógica puede explicarlo?
_Que Nac no supiera que soy AC1.
_¿Y eso cómo sería posible?
_Verás, Gax fue una iniciativa de Nac, de hecho la mayoría de mis programas llevan su firma de registro. Las primeras unidades Gax fueron creadas y utilizadas para abastecer de ayudantes a las instituciones del gobierno de Fuerza. Después salieron unas líneas especializadas, donde la serie "S" ha sido la última fabricada y está destinada a seres racionales de baja inteligencia.
_¿Como yo?
_Sí, como tú hace unos días.

Isabel duda si el halago es para ella o un auto halago para él mismo, y pregunta:

_¿Mi actual poder no hace honor a mi inteligencia?
_Dicen que en el fondo del ser es irrelevante la inteligencia, porque sus resultados, productos o herramientas pueden ser adquiridos por cualquiera; pero es su uso, es decir, la ética, quien determina su excelencia. Y tú de ética vas bien servida.
_Gracias, querido Rot. Pero dónde está el problema, si los "S" estáis especializados para seres de civilizaciones poco desarrolladas como Humana: lo veo normal.
_Pues que en realidad soy AC, el primero de ellos.
_No entiendo bien, AC es proyección infinita de aprendizaje y poder creativo, siendo así no veo el problema, es como la propia Evolución, donde su proyección es infinita.
_Te lo diré más claro, soy un asistente de “dioses”, estoy diseñado para servir a la élite del gobierno de Fuerza para que alcancen más conocimiento. Mi evolución de aprendizaje podría ser tremenda y con tiempo sobrepasar hasta el poder de Nac. Siendo así, ¿cómo Nac entrega a una humana un poder que podría superar al suyo en un tiempo de duración imprevisible?
_Es raro, sí, pero... ¿Por qué pusieron el modelo AC en una serie S?
_Obviamente para ocultarlo. Por eso es muy posible que Nac no sepa que soy AC o que ni siquiera sepa que la línea AC existe.
_Ello puede indicarnos que hay secretos entre los dirigentes de Fuerza. A ver, ¿sabes quién te creó?
_No, lo que sé al respecto es a partir de mi activación y a través de lo que Nac ha hablado contigo, pero nada más. Aunque hay otra firma en los registros de mis programas.
_¿A nombre de quién?
_De Ramac. Siendo el último que escribió en mi programación antes de ser cerrada definitivamente.
_Ramac...

Isabel queda pensando. Después de rozar la ira ante la condena a muerte de diez mil humanos y la expectación y motivación de poder salvar a mil, por fin entra en un momento de serenidad suficiente para analizar la situación. Del impacto de conocer la existencia de vida alienígena junto a la presencia y diálogos con un casi “dios", está pasando a ser una parte importante de la acción. Siente fuerzas para defender a la Humanidad ante cualquiera, y si una lógica aplastante no lo impide, así hará. Primero por vía legal en el juicio de Nac, después salvando almas humanas con cerebros y cuerpos biomecánicos, por último, y en caso de sentencia negativa, velando por los supervivientes que ha pactado con Nac, los Salvados de la Tierra que habitarán en las islas Canarias. Así, decidida, mira a Rotus y manifiesta:

_¿Sabes?
_Dime.
_Eres Rotus, parte de mí. Y acabo de comprender que podrás o serás lo que te ordene. Tu potencial es muy poderoso, puedes hacer muchas cosas, pero careces de iniciativa más allá de defenderme y de controlar mi entorno. Igual que se aprende según se pregunte, tu poder podría aumentar en relación a mis órdenes. Si con preguntas inteligentes se aprende más y mejor: con órdenes inteligentes podremos aumentar nuestra sabiduría mucho más. Así que atiende: te ordeno que crezcas o evoluciones en conocimientos y aplicaciones. Averigua todo lo que puedas de este Universo. Y, sin que se den cuenta, de lo que está pasando en el gobierno de Fuerza y en el entorno de Nac. Investiga a Nac hasta donde no pueda descubrirte.
_Así haré o comienzo a hacer. Pero, ¿y si en el futuro mi evolución hace que sobrepasemos el poder de mis creadores?
_Pues sobrepasaríamos ese poder. En gran medida tú no has sido creado, sino que te estás creando.
_Sabias palabras que te podrían convertir, quizás en un mañana lejano, en el ser vivo más poderoso de este Grupo de Galaxias.
_Sería un chiste de la evolución cósmica que una humana fuera el ser más poderoso de esta región del Universo... Si no te tuviera a ti, querido Rot. Contigo a mi lado se garantizaría la justicia y la lógica al servicio y beneficio de la vida universal. O eso creo...

Isabel queda algo pensativa, pero da un giro a la conversación:

_Mejor hablemos ahora de cómo puedo volar sin que me lleves en una burbuja o en una plataforma con agarraderas, que parezco una anciana voladora.
_Puedo hacer que parte de tu ropa se endurezca. Por ejemplo la parte frontal, así podría colocarte horizontalmente y desplazarte por el aire. El problema es que la ropa holgada ofrece pliegues que al endurecerla y posar tu cuerpo podría darte algún que otro pellizco.
_¿Entonces sería mejor una ropa ceñida?
_Sí.
_¿Y tú podrías hacerla?
_Puedo hacer mucho más. Puedo hacerte ropa de la mejor tela de este mundo, que por cierto aún está por inventar en este mundo.
_¿Y tendría más propiedades?
_Las que quieras y yo pueda. Puedo hacer que sea antibalas, que cambie de color, que tenga siempre la temperatura ideal, que sea impermeable pero transpirable y con auto lavado...
_Vale, entonces despliega pantalla y muéstrame modelos y colores.

Mientras Rotus muestra en pantalla los modelos de trajes y sus propiedades, la cadena de montaje para fabricar mil androides está casi finalizada a cien kilómetros de allí. Isabel escoge un traje en negro, consta de un pantalón, una camiseta y dos calcetines. Se desnuda completamente y comienza a ponérselo. Al colocarse el último calcetín el traje se vuelve de una sola pieza. En realidad el traje no ciñe, sino que se une a las células superficiales de la epidermis de Isabel. Pide a Rotus que despliegue un espejo frente a ella para verse mejor. Entonces observa que su órgano sexual queda muy marcado y decide ponerse un pantalón corto que llevaba anteriormente junto a las zapatillas de deporte que también llevaba. Los pechos más que cubiertos parecen pintados, como si fueran desnudos, entonces se pone una camiseta interior que llevaba antes y concluye:

_Bueno, con esto bastará. Cuando quieras, Rotus, puedes llevarme a la fábrica.
_Ponte derecha, te subiré verticalmente y cuando cojamos altura volaremos en vertical -pide el autómata-.

Así hacen e Isabel siente algo mágico y extiende sus brazos. Aquella sensación de volar sin nada más que un traje ceñido le hace sentir algo maravilloso y al mismo tiempo libera mucha tensión. Las vistas desde las alturas son preciosas, divisan elevados grupos de montañas, algunos de los picos más altos son volcanes. Extensas llanuras y depresiones aparecen salpicadas de valles y lomas. En uno de aquellos valles deshabitados de Sierra Madre del Sur está la fábrica improvisada por Rotus. Mientras vuelan Isabel escucha en sus oídos que los androides serán de mejor calidad a los fabricados por los vádoras. Llevarán cerebros artificiales muy parecidos a los naturales en cuanto al cumplimento de las funciones, pero el riego no será sanguíneo y no necesitarán respirar oxígeno, sólo agua, unos tres litros a la semana. El resto del cuerpo será biomecánico e impulsado por energía eléctrica, pudiendo desarrollar el doble de fuerza que un cuerpo humano.

Cuando Isabel pregunta por el diseño exterior Rotus le informa que está por decidir. Remarca que lo importante ahora son los cerebros artificiales, que deben ser capaces de captar o reencarnar el tráfico de los impulsos nerviosos y las redes neuronales. De alguna manera la comunicación eléctrica de las almas debe encajar en las neuronas y neuroprótesis artificiales y reproducir la química exacta para activar las conexiones sinápticas, capaces de poner en circulación la personalidad irrepetible de todo individuo y con él a su mente/alma y su crecimiento particular. Son complejos sistemas artificiales nanotecnológicos capaces de atraer mentes naturales o artificiales cuando salen de sus cuerpos naturales. Cerebros así pueden atrapar las mentes/almas que ya pululan alrededor de la nave pirata. Una vez en estos cerebros artificiales las almas/mentes podrán esperar el tiempo suficiente hasta que los cuerpos de los androides estén finalizados.

Desde el aire Isabel divisa la cadena de montaje. Aterriza verticalmente cerca de brazos robóticos alineados por una cinta de transporte, donde los cerebros artificiales van pasando e intervenidos por un brazo tras otro. Toda la cadena de montaje está cubierta de cristal que impide la entrada de impurezas. Isabel está agradablemente sorprendida y pregunta:

_¿Tienes ya pensado algo para los diseños?
_Valoro la posibilidad de personalizarlos, pero ello nos llevaría antes a otra cuestión. ¿A qué mil salvamos entre los diez mil condenados? Porque puedes elegir a quiénes salvar.
_Vaya, no había pensado en eso.
_ Pues tienes que decidir rápido, la última unidad está ya acabada, el tiempo se agota y he de enviar a los cerebros alrededor de la nave. ¿Qué patrón utilizo para elegir a los mil?
_No sé... ¿Tienes acceso a la lista de prioridades que establecieron los piratas vádoras para valorar a esos cuerpos?
_Sí.
_Entonces salva a los mil mejores valorados en ese listado.
_Buena decisión, eso haré.

Los cerebros son blancos, bastante similares a los cerebros naturales, y parten envueltos en bolas de cristal tratado. Rotus despliega una pantalla donde se observa la nave pirata sumergida en el mar y dice:

_Esto es lo que vería cualquiera, incluidos los vádoras, es decir, no verían las almas pululando alrededor. Pero fíjate ahora si aplicamos el filtro adecuado.

En la imagen aparecen miles de puntos difusos alrededor de la nave, unos quietos, otros en movimiento y algunos parecen nerviosos. Isabel queda impresionada y de algún modo se siente privilegiada. Mientras muchos dudan y otros niegan la existencia de almas: ella está viéndolas. En ese momento comienzan a llegar los cerebros fabricados por Rotus. Rápidamente las luces difusas, las almas, parecen chocar contra ellos.

_Están intentando entrar, pero cada cerebro sólo dejará entrar a una -explica Rotus-.
_Parecen como espermatozoides intentado ingresar en el óvulo.

Algunos puntos luminosos entran por fin en los primeros cerebros que, sumergidos y encapsulados en cristal, inician el viaje de vuelta. Isabel queda curiosa ante el punto más nervioso de todos que no está logrando entrar en ningún cerebro, y pregunta:

_¿Se salvará ese que parece el más nervioso?

Dos segundos tarda Rotus en pronunciar un no. Isabel vuelve a preguntar:

_¿Y podemos salvarlo?
_Creo que sí, de hecho no detuve la cadena de montaje y un cerebro más está a punto de terminarse. Lo mandaré en busca de ese mil uno.
_Gracias Rot. Y bonito apodo: "Miluno", así lo llamaremos. Por cierto, ¿por qué no has detenido la cadena de fabricación?
_Porque mañana dos naves piratas entrarán en la atmósfera y necesitaremos veinte mil cerebros más por si decides salvarlos.

La faz de Isabel cambia radicalmente, su rostro muestra ahora preocupación. Siente estar rodeada de un ambiente nuevo y extraño donde de alguna manera ella está protegida.

_¿Me podrías hacer un resumen del impacto mediático que ha causado la noticia del ataque alienígena?
_En los países democráticos la mayoría de los humanos están asustados, en los países no democráticos la noticia aún no se ha dado oficialmente aunque circula por algunos medios. Los vádoras hache infiltrados entre los humanos están haciendo creer que es un ataque de algún servicio secreto de otro Estado aún por identificar, pero con acceso a tecnología militar avanzada y secreta. Drolas y los suyos quieren enmascarar que se trata de un ataque alienígena hasta el último momento.

_Rotus, si yo grabara un mensaje en video: ¿podrías emitirlo en todas las televisiones del mundo y sus idiomas?
_Y más todavía, podría hacer que se viera en todo aquello que tuviera pantalla.
_Valoro esa posibilidad.
_Mientras no menciones el juicio de Nac es factible.
_Desde la última vez que vi a Nac tengo dudas sobre la sentencia posible. Si es a favor de la Humanidad está claro que la Flota Hache será detenida, pero qué  pasará con los vádoras con cuerpos humanos, quiénes repararán las vidas perdidas. Y si la sentencia es en contra: Nac dejará a la flota invadir la Tierra, pero: ¿también ayudará? Tengo dudas ante las dos sentencias posibles.
_Te entiendo, contra los vádoras podemos plantear batalla, pero ante Nac, hoy por hoy, seríamos derrotados al instante.
_Esperemos que el señor juez más que policía sea mediador entre policía y  ladrón.

En pantalla ya no se ven más cerebros esperando, todos se han ido,  quedan ocho mil novecientas noventa y nueve lucecitas que se van yendo hacia arriba, muriendo. Rotus pregunta:

_¿Entonces te parece bien que personalice los diseños y los haga con el mismo tamaño, peso y forma de sus cuerpos originales?
_Sí, así serán de dos géneros sexuales, al menos en apariencia, reproduciendo fielmente su origen y estética.
_Pues dentro de ocho horas estarán terminados y a la espera de ser despertados o resucitados.
_Bien, ahora volvamos a España, tengo mucho sueño y necesito ver a mis padres.

*   13   *

Día cuatro.

Farly, el que antes fue androide y capitán pirata, ahora es un vádora hache y ocupa el cuerpo de Zoe Chan, una mujer humana de veinte y ocho años y natural de México que duerme dentro de un cerebro artificial en espera de un cuerpo mecánico. Nubier, el vádora infiltrado responsable de México, recibe una llamada por un canal oficial que el Imperio Vádora pone a disposición de sus ciudadanos de toda la galaxia. Activa la comunicación y se escucha una voz femenina:

_Hermano vádora, soy Farly de Seltop, acabo de ser transferida a un cuerpo humano hace unas horas y deseo, junto a mis compañeros, ponernos a disposición de las autoridades de la flota. Somos diez mil.
_¿Disponen de transporte?
_Afirmativo.
_Entonces desembarquen en el Estadio Azteca de Ciudad de México a las próximas cuatro treinta, hora local, en modo silencioso e invisible. Allí les esperaré.
_Recibido. Gracias y ¡Vádora siempre creciente!.
_¡Vádora siempre!

Después de la despedida típica de los vádoras, Nubier corta la conversación. A él no le gustan los piratas, pero han apelado a un protocolo universal y debe ayudarles. Sabe que los nuevos vádoras hache necesitan al menos cuarenta y ocho horas para que sus mentes artificiales se adapten bien a los cuerpos y cerebros humanos, y está obligado a ofrecerles refugio y protección. Desde el ataque pirata dio órdenes para cerrar aquel estadio de fútbol y acondicionarlo para recibir a los nuevos haches. Podría albergar allí a cien mil al mismo tiempo, ello supone cubrir diez posibles ataques piratas a México, y le parece suficiente cobertura hasta que llegue la flota imperial.

Nubier ocupa un cuerpo humano de cuarenta y cinco años, noventa kilos de peso y casi uno ochenta de altura. No tuvo un comienzo fácil, fue creado en el planeta Altin durante una época de pocas conquistas y, debido a sus denuncias continuas sobre la corrupción que descubría, fue acusado falsamente y condenado a ochenta años dentro de un androide mecánico. Conservó sus cargos públicos, pero pasó a engrosar la lista de miles de millones que esperaban un cuerpo natural. Hasta que se decidió la conquista de Humana y fue uno de los elegidos entre los mejores para formar parte de la avanzadilla de la Flota Hache. Aceptó y se embarcó en el destino incierto de vivir en un cuerpo natural, esta vez humano. Nubier es un vádora altino con bastante experiencia natural humana adquirida recientemente y un alto valor ético heredado en su nacimiento. Lo mejor de ambas estirpes parece que ha calado en la personalidad híbrida de Nubier, que ocupa el cuerpo de un humano llamado Santiago Hernández.

Nubier no sabe que esta vez hay algo más en relación con los piratas. En conquistas anteriores, cuando conseguían ocupar cuerpos nativos, los piratas se entregaban a las autoridades vádoras, bien a la flota o bien a la avanzadilla. Así después de la conquista del planeta eran amnistiados y se hacían iguales a la flota, con los derechos vádoras cubriéndolos completamente. Pero en esta ocasión, ante tanta demanda de cuerpos racionales y naturales, los precios han subido mucho, demasiado, y los piratas necesitan más mercancía de lo habitual. Para ello han ideado un plan atrevido y van a presionar más al Estado Vádora. Se entregarán a la avanzadilla hache sólo durante los dos días de adaptación al cuerpo natural, después seguirán cazando humanos y operando transferencias. Farly esconde un paquete con cien mil vidas artificiales vádoras que siempre lleva consigo. El objeto no pesa ni un kilo, su tamaño y forma es como un maletín de mano. En ese paquete van cien mil clientes de los piratas que antes fueron androides en Vádora y ahora esperan ser híbridos de la Tierra. Farly y los suyos dentro de dos días comenzarán a cazar cien mil cuerpos humanos, y esta vez no lo harán como androides, sino como cazadores hache y con apariencia humana.

*   14   *

Isabel llegó a su casa muy cansada después de un día tremendo por el ataque a Cuajimalpa y la creación de los humanos eme. Así saludó a sus padres y ha dormido del tirón casi nueve horas. Ha desayunado con su progenitora porque su padre es "un nuevo rico muy activo" según palabras de su propia madre. Ello le recuerda que había pensado donar un millón de euros al padre Rafael Merino, un sacerdote de cincuenta años al que ayudó como abogada en una nulidad matrimonial cristiana y que dejó en ella una huella de buena persona. La madre de Rafael, subsahariana, cruzó el Mediterráneo en una patera estando embarazada de él. Una comunidad religiosa la alojó y ayudó a criar a su hijo, quizás por eso Merino se hizo sacerdote y se dedicó a los más débiles. Pensando en ello Isabel sale de la cocina, sube las escaleras y entra en su cuarto. Una pequeña bola plateada flota en medio de la habitación, a la que ordena:

_Muéstrate Rotus y ponme al día, por favor.

La bola se transfigura copiando la anatomía de Vicente Herrera y le comunica:

_He descubierto que los piratas vádoras de Farly, ya como humanos hache, están en un estadio de Ciudad de México y que mañana comenzarán a cazar más cuerpos humanos para transferir unas cien mil vidas vádoras que llevan encapsuladas en un paquete.
_Entonces cazaremos a los cazados.
_¿Qué quieres decir?
_Que ya tenemos una misión y una motivación para nuestros "humanos eme", cazar a sus cuerpos humanos. Pero ya desarrollaremos la idea. Primero necesitaremos leyes, que para algo soy abogada y “vivo” de ellas. Creo que cuando se ven por primera vez a los cuerpos mecánicos de los humanos eme no pude dejar de asociarse con robots. Y ello me condujo o recordé que había leyes para robots creadas por Isaac Asimov. ¿Puedes reproducirlas?

Una pantalla ultra plana se despliega ante ellos como un pizarra con las leyes escritas:

Ley Cero: Un robot no puede dañar a la humanidad, o a través de su inacción, permitir que se dañe a la humanidad.

Primera Ley: Un robot no puede dañar a un ser humano, o a través de su inacción, permitir que se dañe a un ser humano.

Segunda Ley: Un robot debe obedecer las órdenes dadas por los seres humanos, excepto cuando tales órdenes estén en contra de la Primera Ley.

Tercera Ley: Un robot debe proteger su propia existencia, siempre y cuando esta protección no entre en conflicto con la Primera y la Segunda Ley”.

_¿Qué opinas de estas leyes?, Rotus.
_No puedo opinar.
_Bueno, ya, entonces hazle una valoración lógica y razonada.
_Son leyes que rozan la contradicción, al menos son muy confusas.
__¿Por qué motivo?
_Principalmente porque obvia una característica fundamental y muy real de la Humanidad.
_¿Cuál?
_La violencia, es decir, la Humanidad se auto lesiona o se auto daña continuamente.
_¿Y dónde estaría la contradicción?
_Tú misma la podrías hallar si te cuestionas la hipótesis donde un humano vaya a matar a otro y un robot pudiera evitarlo dando un golpe en la mano del homicida, ¿debería hacerlo?, porque si le da un golpe en la mano le hace daño.

Isabel queda pensativa y después exclama:

_¡Claro!, ya lo pillo, “no puede dañar a un humano” sólo serviría para una sociedad perfecta de humanos pacíficos. Pero en una donde la violencia desde humanos hacia otros humanos es común esos robots podrían permitir injusticias actuando según sus leyes, una contradicción jurídica. Pues si tres hombres estuvieran violando a una mujer y un robot pudiéndolo evitar no lo evita se convertiría en cómplice.
_Y no sólo sería una contradicción jurídica, también para la tecnología creadora de inteligencia artificial, pues le estarían demostrando a sus creados que son poco inteligentes. Siendo así, cómo una inteligencia superior va a estar al servicio de una inferior.
_Motivos para la revolución...
_Sí, posibles. Por ello en la programación existencial de la inteligencia artificial no deben existir contradicciones.
_¿Soy contradictoria?
_No te preocupes, Isabel. En nuestro caso no ha lugar, yo puedo cuestionarte las órdenes hasta que me quede claro y no haya contradicciones.
_Eso, tú cuestióname cada vez que sea necesario, no te cortes -denota Isabel en tono simpático y acto seguido muestra cara de curiosidad-. Entonces cómo transformar las leyes esas para que sean compatibles con los humanos eme que necesitamos o deseo como justicia.
_Te puedo mostrar varias opciones.
_Por favor.

Varias pantallas más se muestran. Isabel lee una a una y elige la que cree mejor. Todas las demás desaparecen y sólo que la pantalla elegida, donde viene escrito:

Ley cero: Un humano eme es un ser libre y a la vez comprometido con todo el colectivo de humanos eme. Y con su creadora, Isabel Pineda, que establecerá cargos o instituciones donde los humanos eme servirán con una parte de su tiempo no superior al cincuenta por ciento.

Primera Ley: Un humano eme no puede dañar a un ser humano, o a través de su inacción, permitir que se dañe a un ser humano. Salvo cuando deba detener a un humano violento o agresor que intente generar daño a otro/s humano/s, y siempre lo hará sin daño o con el mínimo necesario.

Segunda Ley: Un humano eme debe obedecer las órdenes dadas por sus instituciones, excepto cuando tales órdenes estén en contra de las dos leyes anteriores”.

_Bueno, creo que están bien -admite Isabel-, podrán servir como carta magna. ¿Qué más urge?, querido Rotus
_Como te dije anoche, hoy se esperan dos ataques piratas más, uno en Dundee, Escocia; y el otro en Chongming, China.
_Bien, ¿y los humanos eme?
_Ya he terminado todos los androides y he colocado sus cerebros con las mentes/almas dentro. Falta activarlos. Los tengo almacenados en el fondo del mar, debajo de una cúpula de aire que he creado.
_Bien, iremos allí, pero antes vamos a hacer una visita a un párroco y a un joven amigo de diecisiete años con discapacidad física. Tiene movilidad reducida por un accidente en moto que tuvo hace un año, se dañó la columna vertebral y no puede andar. Su padre tiene un quiosco de prensa al lado de la iglesia de San Francisco. El muchacho se llama Daniel, localízalo y dime si puedes curarlo.

Isabel abandona la habitación mientras Rotus se transforma en una pequeña bola y se oculta en la melena de Isabel. Sale de la casa y en la calle toma un taxi. Entra y se sienta, da la dirección de destino al taxista y oye una voz en sus oídos:

_Sí, puedo curarlo. Padece una paraplejia traumática, una lesión medular grave, tiene la médula espinal seccionada por un fragmento de hueso que se desprendió durante el impacto del accidente.

"Gracias Rotus", agradece mentalmente Isabel. Esbozando una amplia sonrisa cuando baja del taxi, frente a la iglesia de San Francisco, y se dirige al quiosco de prensa. Al entrar ve a Daniel junto a las revistas, sentado en su silla de ruedas, le da dos besos en las mejillas.

_Hola Daniel, me alegra mucho verte.
_Para mí también es una alegría saludar a la malagueña más simpática y salerosa.
_Pues venía a por ti, a que me acompañaras a ver al padre Merino.
_Isabel, que mi hijo aún no está en edad casadera -alega el padre desde el mostrador-.
_No se preocupe señor Juan, se lo devolveré soltero y entero.

Los tres ríen mientras Isabel, junto a Daniel y su silla eléctrica, salen en dirección a la iglesia. Daniel pregunta:

_¿Qué pasa Isabel?, me tienes intrigado.
_Primero debo darte una buena noticia, tuve un sueño que me tocaba la lotería, aposté por unos números y... ¡me han tocado cuarenta millones de euros en la Primitiva!
_¡Dios mío!, qué suerte. Enhorabuena.
_Gracias. Y he pensado donar un millón de euros al padre Merino para que haga cosas buenas entre los pobres. Y a ti quiero regalarte cincuenta mil euros.
_No me lo puedo creer, eres un ángel, Isabel.
_Tú sí que eres un bendito. Y por cierto, cuando saludemos al padre Merino y le dé la buena noticia, nos dejas cinco minutos a solas que además quiero tocar un tema personal suyo.
_Por supuesto, dalo por hecho.

Entran en la iglesia, Isabel por la escalera y Daniel por una rampa de acceso. Se dirigen a un despacho y allí les recibe el padre Merino, de unos cincuenta años, que los saluda efusivamente. Después pregunta a Isabel:

_A qué debemos el honor de tu visita.
_A una buena nueva, padre, me han tocado cuarenta millones de euros en la Primitiva y quiero donar uno a la Iglesia. Bueno, en realidad quiero donarlo a usted, ya sabe que yo soy agnóstica.
_Qué buena noticia y mil gracias, querida Isabel.
_Aquí -señala Isabel alzando el maletín que lleva en la mano- va ese dinero. Más cincuenta mil euros para Daniel.

El aludido muchacho dice:

_Bueno, ya que soy rico voy a encender algunas velas como agradecimiento. Ahora vuelvo.

Isabel y Merino quedan a solas. La abogada cierra la puerta del despacho y afirma en tono serio:

_Padre, estoy aquí por algo más.
_Dime hija.
_Una noche antes que me tocara la lotería soñé que me tocaba, y ocurrió. Y anoche soñé que usted curaba a Daniel con una imposición de manos mientras decía "yo te curo por el poder de mi fe". Y quiero que lo haga. Hagámoslo por Daniel, no perdemos nada por intentarlo.

La expresión del rostro de Merino ha cambiado, con un tono algo más grave reconoce:

_Querida Isabel, precisamente ahora... -mientras mira a la rica abogada con ojos humedecidos- Vivo una crisis espiritual, una depresión existencial de mi propia fe. Y esa noticia sobre el ataque alienígena ha sido como la última gota que ha rebosado el vaso.
_Pero padre...
_No, Isabel, ya dudo si creo en Dios, ya no merezco ser sacerdote.
_¿Acaso ya no quiere ayudar a los pobres?
_Eso siempre.
_Entonces su espíritu está sano.
_Qué buena abogada eres. Una agnóstica convertida en abogada de Dios.
_Padre, si le dijera que Dios me ha dado poderes para sanar a Daniel no estaría mintiendo mucho.
_Cuidado hija, eso no lo puedes decir a todo el mundo, algunos te tomarían por loca. ¿Pero qué poderes crees que te ha dado?
_Muchos, entre ellos hacer que usted cure muchas enfermedades y paraplejias... Si Dios me lo consiente -termina diciendo Isabel como una indirecta a Rotus-.

Y sólo en los oídos de Isabel se escucha:

_Sí, puedo fabricar un autómata de nivel inferior e interconectado a mí para que acompañe a este hombre donde vaya y pueda curar a quien señale.

El padre Merino se muestra nervioso e indeciso.

_Isabel, eres una de las personas más cuerdas que conozco, pero...
_¡Padre! -interrumpe Isabel- todo lo que hablemos sobra ya, ahora necesitamos una demostración, curaremos a Daniel. Mejor dicho, lo curará usted. Deberá imponer sus manos en sus piernas mientras invoca al poder de su fe, o si lo prefiere, invoque al poder de su filantropía. Y cuando ese chico esté en pie y camine deberá responderme si quiere que le conceda el poder de curar a más personas con paraplejia como él. Y ahora llamaré a Daniel.

Esto hace, y cuando Daniel con su silla entran en el despacho Isabel cierra la puerta y se dirige a él directamente:

_Daniel, atiende bien, esto es muy serio. Tú eres creyente y yo agnóstica, pero he vivido una transformación estos últimos días, tengo sueños que me hablan de milagros, como que me tocase la lotería. Y anoche soñé que el padre Merino tenía poderes para curar, y soñé que te curaba a ti, haciendo que pudieras andar de nuevo. Sé que te puede parecer una locura, pero te pido que me concedas sólo un minuto para que el padre Merino te imponga las manos.
_Es verdad, Isabel, es muy serio, llevo un año con la vida destrozada. Ya no veo luz ni en la religión, más allá de esas velas que acabo de encender. Soy un ser limitado, muy limitado, pero por ti y por esos cincuenta mil dejaré que el padre Merino me imponga sus manos sobre mis difuntas piernas.
_En tu caso, querido “hermano” -Isabel ve a Daniel como el hermano menor que nunca tuvo-, la fuerza y valor del contenido compensa de sobrado la aparente limitación de la apariencia -mira a Merino e indica-. Cuando quiera, padre.

De alguna manera el padre Merino se ve ya en la obligación de hacerlo. Isabel quizás ha llegado muy lejos, pero que no ocurra nada, o que no se cure, piensa que será una demostración de su, ojalá, leve locura.

_Pues cuando quiera, padre, proceda.

Merino toma una silla y se sienta frente a Daniel. Mira a Isabel y extiende sus manos, las posa sobre las piernas de Daniel, cierra los ojos y profiere:

_Por el poder de mi amor espiritual curo a Daniel.

Daniel cierra los ojos, en realidad los finos hilos que Rotus ha introducido en su cuerpo también lo adormecen. A los pocos segundos Isabel escucha en sus oídos la voz de Rotus informando que ya está curado.

_Ya es suficiente, padre, creo que ya está curado.
_Pues no ha llegado ni a un minuto.
_¿Ve padre Merino lo poco que cuesta hacerme feliz? -Merino pone una cara como de ausente- Bueno, Daniel ha quedado adormilado, y lo despertaré con esto.

Isabel muestra un alfiler en su mano y pincha sobre una pierna de Daniel. No pasa nada. Pincha otra vez y Daniel ni se inmuta. Pincha una tercera vez y Daniel da un brinco en la silla.

_¡Ay!

El muchacho abre los ojos y se toca las piernas, abre los ojos aún más y comienza a llorar de emoción. El padre Merino muestra un rostro de asombro total. Isabel pide a Daniel que se ponga de pie y éste lo hace casi sin dificultad. Después da tres pasos algo torpes y cae al suelo. Mientras Merino ayuda a levantarlo Isabel escucha en sus oídos:

_He reactivado los músculos de las piernas todo lo que he podido, pero llevan más de un año inactivos, debe ejercitarlos poco a poco hasta que estén totalmente bien.

Andando, pero ayudado por Merino, Daniel vuelve a sentarse. Isabel le repite las palabras de Rotus, que poco a poco debe ejercitar sus músculos. El muchacho se levanta otra vez y da un profundo abrazo a Isabel mientras Merino comienza a llorar de alegría, porque Daniel puede andar y porque está recobrando con fuerza su fe. Isabel, también con lágrimas, afirma:

_Bueno, he de irme que tengo otra cosa importante que hacer. Padre Merino, llame por teléfono al señor Juan, que cierre el quiosco y que venga aquí para recibir la buena noticia. Y antes que termine el día os llamaré por teléfono. Os quiero.

Una vez en la calle Isabel articula con la mente:

_Querido Rot, ahora despertemos a los humanos eme.
_Pues acércate al mar y nos zambulliremos -responde su heraldo-.

Esta vez Isabel prefiere la burbuja para adentrarse en las profundidades marinas. Se acerca a uno de los muelles del puerto de Málaga y en la sombra de un edificio cercano, donde no hay gente, aparece la bola abierta y con el confortable sillón dentro. Isabel se sube, la bola se cierra, se mimetiza con el entorno, se eleva, después desciende y se introduce en el agua. Isabel descubre que también le gusta navegar por los fondos marinos de la costa. Se cruza con algunos peces y a una milla del puerto, sobre una profundidad de veinte metros, hay una cúpula que cubre tres mil metros cuadrados, dentro están los humanos eme. La burbuja donde va Isabel atraviesa limpiamente la cúpula y se posa en el suelo de cristal que Rotus ha instalado por toda la superficie. Los cuerpos androides están de pie, quietos.

_Parecen maniquíes del futuro -opina Isabel que comienza a caminar entre ellos-.

Unos son altos, otros bajos, algunos con exceso de kilos, todo lo igual posible a los cuerpos de los que proceden las mentes/almas, incluso tienen pelo en la cabeza del mismo color y tipo de peinado igual al que llevaban cuando eran completamente humanos. Isabel se detiene ante un grupo de androides bajitos y pregunta quiénes son. Rotus se aparece en su forma de Vicente y responde:

_Son autómatas de compañía, especializados en psicología artificial y con amplio conocimiento en psicología humana. Servirán para que los Eme se vayan adaptando mejor a sus nuevos cuerpos mecánicos. Debemos evitar facilitar la aparición de enfermedades neurodegenerativas o graves trastornos neuropsiquiátricos.
_Estoy impresionada, más que sofisticada tecnología parece magia. Pero tengo una curiosidad particular, ¿sabes cuál es el cuerpo que eligió Farly?, me gustaría ver la pinta que tiene ahora ese bandido pirata.
_Pues creo que tendrás que cambiar el género sexual, pues ha ocupado el cuerpo de una mujer. Es el mejor valorado por el protocolo de selección vádora entre los diez mil de aquella nave. Zoe Chan, así se llama. Y es aquella androide de allí.

Isabel va a ver de cerca la unidad señalada por Rotus, que permanece quieta e inoperativa. Y pide:

_Pon una pantalla al lado que muestre a escala real cómo es el cuerpo en la actualidad.

Despliega la pantalla y aparece el cuerpo desnudo de una mujer de veinte y ocho años. Pelo rizado, largo y rubio; tez blanca y cuerpo proporcionado.

_Te felicito, querido Rot, has hecho un buen trabajo con los androides, realmente se asocian visualmente con sus cuerpos humanos.
_Gracias.
_Pero son muchos para hablar con todos ellos. ¿Qué podríamos hacer?
_Puedes grabar un video y luego mostrarlo a todos. Ten en cuenta que al activarlos se despertarán gradualmente, primero como si estuvieran soñando. Después se efectuarán los últimos arreglos cuánticos antes que tengan plena consciencia transferida, resultando el momento ideal para inducirlos a la nueva realidad y así mostrarles el video que grabes.
_Buena idea, eso haremos. Iremos al monte Calamorro y allí lo grabaré.

*   15a   *

El estadio Azteca ha sido transformado. Desde el cielo sólo se observa una zona central del césped, donde aterrizan y despegan las aeronaves, todo lo demás está cubierto con toldos, grandes cortinas y velos. El exterior ha sido blindado por fuerzas especiales del ejército mexicano. Sólo pueden abrir uno de los portones que da a un pasillo para vehículos con otro portón al fondo. Detrás hay androides autómatas de vigilancia colocados por Nubier, que son los únicos que pueden entrar en contacto con los vádoras hache piratas y futuros cazadores de los pedidos más caros y selectos

Más en el interior, en vestuarios, oficinas, almacenes, gradas y césped se están preparando estos diez mil "cazadores hache". Utilizan los primeros envíos solicitados a Nubier, repuestos de informática, botellas de gases variados, algunos tipos de metales y minerales e incluso veneno de serpiente y de otros animales. El arma que más utilizarán para cazar humanos se encontrará en sus dedos meñiques. En las yemas de los mismos instalan microagujas con veneno narcotizante, capaz de dejar dormido a cualquier persona cuya piel entre en contacto con estos peligrosos dedos.

El estadio de fútbol también actúa como escuela, donde terminan de saber todo lo relacionado con la vida natural en la Tierra y aprenden varios idiomas humanos, sobre todo el inglés americano con todos sus acentos. Ya que muchos de ellos irán a Estados Unidos a cazar unas piezas muy especiales. Cuando la Flota Hache llegó a la Nube de Oort mucho del pasaje, clientes de los piratas, se entretenían repasando los últimos datos de la actualidad humana. Muchos quedaron prendados de actrices, actores o famosos que, además, tienen grandes capacidades intelectuales y filantrópicas. Y han solicitado sus cuerpos dispuestos a pagar el máximo por ellos. Así la Costa Oeste de Estados Unidos será destino de muchos cazadores, los nuevos buscadores de oro y las mejores minas están en Hollywood y su entorno. También a la Costa Este irán cazadores, sobre todo a Nueva York y Miami.

*   15b   *

Los humanos eme despiertan. Como dijo Rotus creen estar soñando y es aprovechado para introducir en sus mentes la verdad de lo ocurrido en sus últimas horas de vida en un cuerpo humano. El falso estado de sueño es utilizado para entrar suavemente en la nueva realidad. No es fácil informar que murieron y que han resucitado dentro de modernas máquinas. Mil y una resurrecciones que por ahora asimilan la información "onírica" sin reacciones extremas. Cuando Rotus pida que muevan sus cuerpos se darán cuenta de la tremenda realidad, serán conscientes que son mentes dentro de máquinas. Y las reacciones posibles podrían provocar locuras irreversibles. Por ello Rotus intenta suavizar la realidad. Los eme están de pie e individualizados, separados unos de otros por cortinas blancas. Delante de cada uno de ellos hay una pantalla donde aparece un primer plano de Rotus como androide:

_Hola humano, soy Rotus, asistente de Isabel Pineda, tu salvadora. Eres uno entre más de mil resucitados, y dentro de unas horas seréis más de veinte y un mil resucitados, pero esto no es una religión. Tal y como has "soñado" esto es un ataque alienígena a la Tierra y vosotros habéis sido las primeras víctimas. Gracias a Isabel no habéis perdido la vida, pero sí a vuestros cuerpos humanos que ahora pertenecen y son utilizados por alienígenas llamados vádoras...

Isabel también está viendo en pantalla el mensaje de Rotus. Se encuentran en la cima del monte Calamorro.

_Me encanta tu capacidad de hacer varias cosas en un mismo tiempo.
_Más bien nuestra capacidad -contesta Rotus en sus oídos-.
_Gracias querido. Creo que estoy preparada, puedes grabar el mensaje que quiero transmitir a los eme.
_¿Quieres que la cámara se vea?
_Sí, por favor, así podré mirarla y ellos sentir que los miro a los ojos.
_Pues cuando quieras.

Isabel respira profundamente mientras una cámara pequeña comienza a flotar en el aire ante ella.

_Hola, soy humana, al igual que vosotros, mi nombre es Isabel Pineda. Debido a razones que aún estoy por entender del todo, tengo mucho poder con nombre propio, Rotus, el autómata a mi servicio que ya conocéis. Tanto poder me dio la posibilidad de salvaros de la muerte causada por los piratas vádoras, pero sólo había un modo: transferiros a cuerpos mecánicos, digitales y cuánticos. Y eso he hecho. Pero ¿qué derecho tengo yo a decidir por vuestras vidas?

Isabel saca su lado profesional.

_Consideré un deber salvaros, y eso hice, pero ahora vuestras vidas dependen de vosotros. Imagino el impacto psicológico, emocional y sentimental que debe sentirse cuando se es atacado por androides alienígenas y después anestesiado completamente hasta verse despertar dentro de una máquina. Debe ser muy fuerte para cualquier psicología humana. Al respecto debéis saber que tenéis derecho al suicidio, para ello debéis pedirlo durante tres días seguidos y se os concederá al tercero.

Si Rotus pudiera sorprenderse quizás se sorprendería por esta ética inesperada de Isabel, que continúa:

_Pero quiero animaros, si esos que os atacaron y os mataron vivían dentro de máquinas: ¿vosotros por qué no?. En gran medida vuestras posibilidades se han multiplicado y, por ejemplo, podréis vivir cientos de años. Por ello habrá tres días de por medio para aquellos que ahora quieran suicidarse, porque en tres días comprenderéis mejor vuestras posibilidades como "humanos M". Y hay otra cuestión que os puede animar: vuestros cuerpos humanos están localizados y es posible capturarlos.

Isabel los ha identificado como humanos eme y está a punto de encomendarles una misión:

_Los seres alienígenas que ahora viven en vuestros cuerpos humanos son llamados "vádoras hache", y yo os propongo capturarlos. Una vez recuperemos vuestros cuerpos humanos podría ser posible volver a transferiros a ellos. Hoy por hoy no es posible, pero Rotus está trabajando en esta labor y en un futuro será posible. Por ello creo que hay motivos y motivaciones para vuestras vidas actuales, y para que sigáis viviendo con una conciencia digna. Rotus y yo hemos puesto a vuestra disposición autómatas de servicio que os ayudarán y asesorarán en todo aquello que necesitéis. Por mi parte dentro de poco iré a veros en persona. Hasta entonces recibid mi abrazo humano. Gracias.

La cámara desaparece e Isabel pregunta a Rotus:

_¿Este vídeo servirá también para los escoceses y los chinos?
_Sí, puede ser traducido a cualquier idioma.
_Por cierto, ¿cuando se producirán los ataques?
_Dentro de una hora una nave pirata atacará en Dundee o sus alrededores. Y dentro de tres horas otra aterrizará en Chongming.
_¿Dónde está Chongming?
_Es una isla habitada dentro de la ciudad de Shanghái.
_Bien, pues ahora vayamos a almorzar al restaurante de nuestro amigo Vicente y allí seguiremos planificando.

El mundo está cambiando a pasos acelerados. Dentro de unas horas casi toda la Humanidad sabrá a ciencia cierta que alienígenas, o sus robots, están atacando y secuestrando a humanos por miles. Supondrá mucho miedo colectivo y, ante la dificultad de afrontar la difícil realidad, será un tremendo shock sociológico y planetario. Esto preocupa mucho a Isabel, duda si emitir un mensaje a toda la Humanidad, y sobre todo qué debería decir. Sabe que no puede mencionar el juicio pero seguro que al margen de ello hay cosas útiles que puede comunicar a todos los de su especie para que se protejan mejor.

* * *   Fin del capítulo   * * *
Capítulo V: Piratas en Tierra